La UE acuerda redoblar las sanciones a Teherán
► Borrell pide a las partes en conflicto «alejarse del abismo» ante el peligro de «una guerra regional»
Los Veintisiete acordaron ayer ampliar la lista de medidas restrictivas contra Irán para golpear su capacidad de construir drones y misiles y también incluir el suministro de armas del régimen de los ayatolás a sus aliados en Oriente Medio. El máximo representante de la diplomacia comunitaria, Josep Borrell, ha encargado al Servicio de Acción Exterior que comience a preparar esta nueva ronda de castigos y se espera que este tema vuelva a ser debatido en la reunión de los ministros de Asuntos Exteriores de los Veintisiete el próximo lunes.
Los jefes de la diplomacia comunitaria han mantenido este martes una reunión por videoconferencia, convocada de manera extraordinaria, para analizar los últimos acontecimientos en Oriente Medio, después de que Irán atacara este sábado Israel con una batería de más de 300 drones y misiles de crucero que el poderoso sistema Cúpula de Hierro ha conseguido interceptar.
Las cancillerías europeas se enfrentan a la difícil disyuntiva de actuar contra Teherán por estos hechos, sin que ello implique que esto pueda ser interpretado por Israel como un cheque en blanco a la hora de responder a este ataque. Los Veintisiete han advertido estos días una y otra vez al gobierno del primer ministro, Benjamin Netanyahu, contra una respuesta desproporcionada que extienda el conflicto hacia consecuencias imprevisibles en un momento de máxima tensión, debido a la ofensiva del Estado hebreo contra la Franja de Gaza tras los ataques de Hamás del 7 de octubre.
Borrell, tras la reunión de este martes, pidió a las partes «alejarse del abismo» en el que ahora mismo se encuentra Oriente medio tras el ataque «sin precedentes» por parte de Irán que puede desembocar en una «guerra regional», si se incrementa la intensidad de la respuesta militar. «No quiero exagerar pero en Oriente Medio estamos al borde de un precipicio muy profundo», alertó.
Hasta el momento, los Veintisiete han puesto en marcha tres paquetes diferentes de sanciones contra el régimen de los ayatolás por violaciones graves de los derechos humanos, las actividades de proliferación nuclear y el uso de drones iraníes en la agresión rusa contra Ucrania.
El 20 de julio de 2023, las capitales europeas dieron luz verde a un nuevo marco de sanciones al comprobar que Irán estaba socorriendo a Moscú en la guerra de Ucrania a través de sus sofisticados drones, más difíciles de detectar que los radares convencionales.
Este nuevo régimen prohíbe la exportación a Irán desde la Unión Europea de componentes utilizados en la construcción y producción de vehículos aéreos no tripulados y también establece restricciones de viaje y medidas de inmovilización de activos tanto contra las personas como las empresas que están colaborando en la fabricación de estos drones.
Aunque las sanciones europeas tienen un fuerte contenido simbólico, no parecen haber afectado demasiado al apoyo iraní al régimen del presidente ruso, Vladimir Putin, ya que estos aparatos no tripulados están siendo utilizado en el ataque contra Járkiv, la segunda ciudad más importante de Ucrania. Tras la ofensiva de este sábado los Veintisiete se han mostrado a favor de adaptar este marco a los drones fabricados para atacar Israel, así como a los misiles. Según Borrell, no hay evidencias de que Irán haya suministrado misiles al Ejército ruso en su ofensiva en Ucrania.
Uno de los grandes interrogantes es cómo afectará esta crisis al acuerdo impulsado en 2015 por el que Teherán se comprometía a limitar la cantidad de uranio enriquecido (JCPOA) y utilizar su programa de desarrollo nuclear únicamente a fines pacífico. A pesar de que el expresidente de EE UU Donald Trump abandonó este pacto en 2018, la Unión Europea ha luchado durante todos estos años para mantener su vigencia. En enero de 2016, las cancillerías europeas levantaron todas las sanciones económicas y financieras de la UE en materia militar contra Irán, pero continuaron vigentes algunas restricciones.
Ante la falta de progresos, en octubre de 2023, los Veintisiete decidieron mantener estos castigos. El presidente francés, Emmanuel Macron, ha abogado por incrementar las sanciones contra el régimen de los ayatolás por su programa nuclear.
Sobre la posibilidad de actuar contra la Guardia Revolucionaria iraní, Borrell ha explicado que para dar un paso en este sentido es necesario probar sus vínculos con el terrorismo.
Los Veintisiete no desean que el castigo a Teherán sea visto como un cheque en blanco por Tel Aviv
Los 27 prohíben la exportación de componentes para la construcción y la producción de drones