La Razón (Nacional)

Un inmenso paisaje de viñedos en blanco y negro

► Además de los cultivos de plátanos y aguacate, las viñas de La Palma de igual forma se ven ahogadas por la caída incesante de ceniza

- Andrea Pérez.

LaLa lava que sale del nuevo volcán de La Palma ha hecho desaparece­r mu-chos mu-chos cultivos y a esos daños se une los que ahora provocará la ceniza, ya que tapa la luz del sol y, con ello, dismi-nuye dismi-nuye la posibilida­d de que las plan-tas plan-tas produzcan la fotosíntes­is. Ade-más, Ade-más, el penacho de humo procedente del cono principal, que expulsa a su vez gran cantidad de gases, afecta a aquellos cultivos que no se ven directamen­te tocados por las coladas de lava, pero que pudren pudren el fruto y dejan a los agricultor­es agricultor­es palmeros sin buenas cosechas para el próximo año.

La zona norte de la isla vive los efectos del volcán de una manera menos dramática que la zona sur. A pesar de que los viticultor­es del norte no han sufrido las consecuenc­ias consecuenc­ias de la ceniza volcánica en grandes cantidades, tampoco han conseguido aprovechar este fenómeno fenómeno en forma de fertilizan­te y abono para los cultivos, un infortunio infortunio que también afecta al norte además de los agricultor­es de la zona suroeste, quienes ya han perdido perdido la mayor parte de las cosechas de este año y probableme­nte parte del próximo.

Miguel Ángel Ferraz es viticultor de la zona norte de la isla, del municipio municipio de Barlovento. Su cosecha tiene una extensión de 2.000 metros metros cuadrados. Además del cultivo de la uva, Miguel también posee una finca de explotació­n agrícola destinada a la flor de la prótea, que alcanza una extensión de 5.000 metros metros cuadrados. Este cultivo se añade añade al catálogo de cultivos típicos del mundo agrícola palmero. Según los peritos, la pérdida de Miguel Ángel en las plantacion­es de próteas próteas ya alcanza un 40% de pérdidas, algo que lamenta profundame­nte porque este año «se estaban dando muy bien, pero la vida es así». Sobre la viña, Miguel asegura que aún no se pueden estimar las pérdidas de este tipo de cultivo puesto que los resultados de las cosechas se verán a partir de marzo, pero «tal y como están las cosas por las zonas más afectadas por las cenizas no sabemos sabemos qué nos podemos encontrar». A pesar de lo que muchos aseguran con respecto a los beneficios que puede traer la ceniza a los cultivos, la mayoría de agricultor­es descartan, descartan, por el momento, cualquier beneficio en sus cosechas puesto que se trata de una gran cantidad de ceniza la que está expulsando el volcán y, por lo tanto, «un ahogo a cualquier cultivo», apunta Miguel. Miguel.

El impacto que ha tenido el viñe

do a raíz de la erupción volcánica «no se ha conseguido valorar en su totalidad porque no hemos podido acceder a la zona», indica Eva Hernández Hernández Alonso, gerente de D.O Vinos La Palma. Además, apunta que se han pedido permisos y a pesar de hacer lo posible, desde la Dirección de la Emergencia han valorado como «muy peligroso» el acceso de los peritos a valorar en números reales el daño total que está ocasionand­o este gigante rojo en la viña, teniendo en cuenta que el proceso eruptivo aún no ha terminado terminado y, tal y como señalan cada día, «es imprevisib­le». Lo que sí se ha autorizado a día de hoy son diversos diversos vuelos de dron por la zona que han permitido evaluar en mayor mayor o menor medida que cantidad de terreno de cultivo de viña se ha visto afectada; ya sea por las propias propias coladas de lava o por la dispersión dispersión de gases y ceniza. «Cuando ves las imágenes te cuesta reconocer el territorio por la cantidad de material material lávico que hay», señala Eva. También destaca que previo a los vuelos de reconocimi­ento de dron, el equipo de Vinos La Palma marcó en un mapa las zonas donde querían querían obtener imágenes para posteriorm­ente posteriorm­ente ser evaluadas. «En este caso, solo evaluamos la zona sur, que comprende Jedey, Las Manchas, Manchas, San Nicolás, el Llano de Tamanca... Tamanca... y nos cuenta tremendame­nte tremendame­nte identifica­r los sitios. Se ha convertido en una visión en blanco y negro de lo que era La Palma», añade la gerente.

A pesar de lo complicado que supone hacer una valoración del daño en viñedo, Eva asegura que los últimos datos obtenidos por los vuelos de dron, apuntan que la superficie superficie afectada ya alcanza las 40 hectáreas de terreno inscrito en la denominaci­ón de origen, aproximada­mente. aproximada­mente. Además, de la parte sepultada por las coladas, que supone supone alrededor de 15 hectáreas aproximada­mente, ya se habla de más de 20 hectáreas exclusivam­ente exclusivam­ente afectadas por la ceniza volcánica en el sur de la isla, «esa parte sí sería susceptibl­e de ser recuperabl­e, pero va a depender de cuánta ceniza ceniza tenga encima, que a su vez depende de la proximidad al cono volcánico, la dirección de los vientos, vientos, de las ganas y ayudas de las personas e institucio­nes en la recuperaci­ón recuperaci­ón de estos cultivos», añade Eva. De la zona afectada por la acumulació­n acumulació­n de ceniza, se calcula que un 10% de la uva que entra en las bodegas con denominaci­ón de origen origen entra de ese área actualment­e afectada.

Actualment­e, en la isla de La Palma Palma que correspond­e al Consejo Regulador hay 485 hectáreas para el cultivo de la viña. Al restarle las hectáreas que ya se encuentran prácticame­nte inutilizab­les debido a los efectos del volcán, Eva Hernández Hernández asegura que «ya se está notando esa deficienci­a en la producción producción de viña y en los materiales recogidos de estas zonas, que aunque aunque supongan un porcentaje menor menor que los cultivos de viñedo en el norte, forman parte de la cadena de producción y por lo tanto en cuanto cuanto a cantidades, notamos la escasez». escasez». Las cosechas de este último año se han visto extremadam­ente mermadas por varios factores que ha vivido la isla aparte del reciente volcán: las sequías, los incendios, olas de calor que cada vez son más frecuentes. « El volcán ha llegado para acrecentar un problema que ya venía caminando desde hace bastantes años; ha venido a minar los ánimos de todos y a sacar a relucir relucir unas carencias que veníamos arrastrand­o», apunta Eva.

Recienteme­nte, el equipo de Vinos Vinos de La Palma, ha mantenido encuentros con representa­ntes agrícolas de la Institució­n Insular para exponer los problemas que el cultivo de la viña arrastra desde hace años y las escasas soluciones que desde la sede central se otorgan. otorgan. « Necesitamo­s ayudas inminentes, inminentes, pero también un plan de futuro que nos permita una solvencia solvencia a largo plazo, a diez o quince años. Mi sensación sobre la situación situación actual es que todos estamos muy abrumados porque esta pesadilla pesadilla no ha acabado», concluye.

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AP Y A. PÉREZ Un técnico analiza el suelo de la isla tras 84 días de erupción del Cumbre Vieja, que no ha respetado las áreas de viñedos del sur de la isla
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La D. O. Vinos La Palma supone uno de los ingresos de la isla

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