O Putin, o tanga
CadaCada año, por estas fechas, no dejo de echar un vistazo al festival de Eurovi-sión. Eurovi-sión. Por supuesto, no soy tan cándido como para pensar que el evento tenga nada que ver estrictamente con lo mu-sical. mu-sical. En eso, la Unión Europea supo mirar lejos desde buen prin-cipio prin-cipio y lo llamó « Eurovisión» y no « Eurocanción», dado que es bien cierto que la visión es la clave cen-tral cen-tral del asunto.
Este año en concreto, la visuali-zación visuali-zación más espectacular y decisi-va decisi-va ha sido la de la parte inferopos-terior inferopos-terior del tronco de nuestra representante y sus escuderas. Era una deliciosa maravilla la selectí-sima selectí-sima construcción y el dificilísimo movimiento de rotación que eran capaces de imprimirle a esa zona. Rendida admiración.
Supone la demostración de que la radiodifusión española ha dado por fin el salto al futuro y se ha apercibido de que ese –y no otro– es el punto central del certamen. Así lo acredita el haber consegui-do consegui-do la mejor posición de los últimos años. Por tanto, si queremos ga-nar, ga-nar, sabemos ya lo que debemos hacer en próximas ediciones.
Asimismo, ha sido también un acierto de la radiodifusión públi-ca públi-ca española abrirse decidida-mente decidida-mente al nuevo mundo de las marcas, del «branding» y del pa-trocinio, pa-trocinio, enviando a una repre-sentante repre-sentante llamada Chanel. El próximo año podemos enviar a un dúo llamado Dulce y Gabbana o –mejor aún, que quedará más patrio– Victorio y Luchino (o in-cluso in-cluso Christian Dios, si deseamos presumir de espiritualidad). En todos los casos, lo importante será que la zona glútea –masculi-na, –masculi-na, femenina o transgénero– se visualice con la óptica correcta entre ese marasmo de refritos re-calentados re-calentados que es el festival en su aspecto sonoro: Inglaterra ofreció una canción titulada « Space Man», como si «Space Oddity» de David Bowie o « Rocket Man» de Elton John nunca hubieran exis-tido. exis-tido. Por supuesto, los derechos de autor de su emisión fueron para los autores copiones. Seguro que el año que viene se presentan con una originalidad titulada « Rocket Oddity».