Hannover, el castillo de la discordia ya tiene dueño
El príncipe Ernesto de Hannover demandó a su hijo para recuperar la propiedad y la Justicia se ha pronunciado
TrasTras varios años de dis-puta dis-puta en los tribunales, por fin la Justicia ale-mana ale-mana se ha pronun-ciado pronun-ciado sobre la deman-da deman-da que Ernesto de Hannover interpuso contra su primogénito, Ernesto Augusto, a finales de 2020. El príncipe reclamaba a su hijo la devolución del castillo de Marienburg que, entre otras pro-piedades, pro-piedades, le legó entre 2004 y 2007 como parte de una herencia ade-lantada. ade-lantada. Sin embargo, el heredero de la Casa de Welf decidió vender el castillo a la Administración del Estado de Baja Sajonia por la can-tidad can-tidad simbólica de un euro, dado que le resultaba imposible asu-mir asu-mir los elevados gastos de man-tenimiento man-tenimiento del inmueble, aban-donado aban-donado durante muchos años, que ascendían a más de 25 millo-nes. millo-nes. A Ernesto de Hannover no le sentó bien que su hijo quisiera deshacerse de la joya de la corona de la familia, y lo llevó a los tribu-nales tribu-nales para detener el proceso de la venta. El príncipe reclamaba no solo la devolución del castillo de Marienburg, sino también de la casa de Herrenhausen de Hanno-ver Hanno-ver y de otras joyas, piezas de arte u objetos históricos que, según él, su primogénito había sustraído. Su mayor preocupación, quizás, era la colección de muebles de plata maciza que se encontraba en el interior de la fortaleza y que perteneció al Rey Jorge II de Gran Bretaña.
Ahora, el Tribunal de Distrito de Hannover ha desestimado la demanda del príncipe contra su hijo, que seguirá siendo el dueño de los bienes donados por su padre. padre. Lo cierto es que el jefe de la casa se retiró hace meses del proceso proceso judicial, pero el pleito siguió su curso por la participación de EAH BetriebsgmbH, una empresa empresa de Salzburgo implicada en el caso. Ernesto de Hannover había vendido sus activos a esta sociedad, sociedad, que buscaba recuperarlos, pero la Justicia ha dictaminado que aquella cesión fue nula «por razones legales» y que la compañía compañía no posee ningún derecho sobre sobre el castillo de Marienburg ni el resto de propiedades de Ernesto Augusto. Tampoco la Justicia ha estimado el argumento presentado presentado por Ernesto de Hannover para despojar a su hijo de la herencia, aludiendo a «la grosera ingratitud» ingratitud» que habría mostrado con él tras cederle parte de sus bienes. El príncipe lamentó que su primogénito primogénito ni siquiera le había visitado visitado durante sus meses de enfermedad, enfermedad, pero los magistrados consideraron que «difícilmente podía esperar algo más» teniendo en cuenta la complicada situación situación familiar en la que están inmersos. inmersos.
Relaciones familiares
No es ningún secreto que la relación relación de Ernesto de Hannover con sus hijos no ha sido del todo buena buena a lo largo de su vida, y la demanda demanda que interpuso contra su primogénito es solo la punta del iceberg. Sus tensiones se remontan remontan al año 2017, cuando el príncipe príncipe mostró su férrea oposición a la boda de Ernesto Augusto con la diseñadora rusa Ekaterina Malysheva, Malysheva, su actual esposa. El marido de Carolina de Mónaco temía que, tras un supuesto divorcio, la modista reclamara parte de los bienes de la Casa de Welf, y fue entonces cuando comenzó a reclamar reclamar la devolución de los mismos mismos a su hijo mayor. Su distanciamiento distanciamiento se hizo evidente en mayo de 2019, tras su sonada ausencia en el bautizo de su primer nieto.
Algo mejor parece ser la relación relación entre Ernesto de Hannover y su segundo hijo, Christian. El príncipe sí acudió a su enlace con Alessandra de Osma, que tuvo lugar en 2018 en la basílica de San Pedro de Lima, Perú. Sin embargo, embargo, tras protagonizar un desagradable desagradable altercado durante la celebración, celebración, a padre e hijo no se les volvió a ver juntos hasta tres años más tarde, cuando se publicaron unas tiernas fotografías en las que aparecían disfrutando de un día de playa en Ibiza con los pequeños pequeños de la familia: los mellizos Nicolás Nicolás y Sofía, fruto del matrimonio matrimonio entre Christian y Alessandra de Osma. En lo que respecta a Alexandra, hija de Ernesto y Carolina Carolina de Mónaco, parece sentirse más próxima a su familia monegasca monegasca y se conoce que la relación con su padre y sus hermanos es fría y distante.