El copago llega a los parques naturales
Fundaciones y entidades privadas gestionarán servicios de información y podrán cobrar a los visitantes en Catalunya
El copago llegará a los espacios naturales de Catalunya. Disfrutar de ellos con mejor información tendrá un precio. El Departament d’Agricultura prevé incorporar o reforzar la presencia de las fundaciones y entidades sociales privadas en las tareas de información, difusión, educación e interpretación de la naturaleza en estos enclaves. La gran novedad es que, por primera vez, el visitante pagará por estos servicios de la mano de la iniciativa privada. Así, por ejemplo, la fundación World Nature cobrará a partir de este verano por la entrada en uno de los centros de naturaleza del parque natural del Cadí, mientras que los visitantes a los centros de información de la Zona Volcànica de la Garrotxa (y enclave de la reserva) abonarán una entrada a una empresa privada.
La crisis y la falta de recursos públicos para los parques están obligando a la Generalitat a buscar nuevas fórmulas de cofinanciación para sostener o llevar a cabo algunos servicios.
A partir del verano, los visitantes del centro de naturaleza del parque del Cadí en Bagà (Sant Joan de l’Avellanet) pagarán tres euros por entrar en su recinto. Este centro (propiedad municipal y ligado al parque a través de un convenio con la Generalitat) no ha funcionado hasta ahora (pese a la inversión realizada) por falta de recursos de la Administración autonómica. Sin embargo, a par-
El centro de naturaleza del Cadí en Bagà, el primero de pago, lo gestionará World Nature
tir de ahora será explotado y gestionado por la fundación World Nature. Por tres euros se podrá visitar una exposición sobre el Cadí, contemplar un audiovisual y visitar la finca con especies en peligro. También organizará cursos, talleres para grupos familiares y demás. Y quienes quieran una visita en profundidad del parque podrán contratar un guía profesional por 15 euros.
El Departament d’Agricultura (responsable de los espacios naturales) también tiene previsto que sendas entidades privadas gestionen los centros de infor- mación de Alfara de Carles y Prat de Comte, en el parque natural dels Ports.
El Departament d’Agricultura ha elaborado un plan estratégico sobre el uso de los equipamientos de los espacios naturales en el que distingue entre aquellos que seguirán bajo intervención pública (formando parte de una oferta básica gratuita) y aquellos que podrán estar a cargo de fundaciones, grupos conservacionistas o entidades privadas, que podrán cobrar por el servicio. “La información básica será gratuita, pero si alguien quiere un guía, hacer una excursión o efectuar una visita a un rincón geológico muy concreto, eso tendrá un coste”, dice Ignasi Rodríguez, subdirector general de la Biodiversitat.
Rodríguez destaca que en el caso del parque del Cadí, la participación de WN permitirá recuperar un centro de educación ambiental “sin tener que recurrir a los presupuestos públicos”.
Antoni Carulla, presidente de World Nature, destaca que la participación de la sociedad civil en este tipo de proyectos puede ser fundamental en un momento en que “los parques naturales no tienen suficientes recursos”, mientras que “las entidades podemos arrancar este tipo de proyectos y sacarles rendimiento”.
Carulla agrega que, además, es- tas actividades son un apoyo a la conservación de la naturaleza y encajan perfectamente con la voluntad de estas fundaciones y entidades ambientalistas de hacer participar a la ciudadanía en la conservación de la naturaleza.
La gran ventaja es que se garantiza un servicio (que se presta ahora de manera precaria) de forma que la Administración no tiene que hacer aportaciones económicas nuevas, mientras que abre la opción a que fundaciones o asociaciones desarrollen una actividad económica. “Este tipo de participación de fundaciones, asociaciones o entidades tiene una gran capacidad para dinamizar la economía local”, destaca también Rodríguez.
En el conjunto de España no hay directrices comunes. En general, predomina la idea de que la entrada en los parques naturales debe ser gratuita. Sin embargo, existen algunas excepciones. Por ejemplo, en Doñana se hacen determinados recorridos en vehículos, por los que hay que pagar, pero junto a ellos es posible disponer de otros itinerarios gratis. Y hay parques en los que por su especial orografía se precisa un acceso de pago. Y en Aragón se ha tendido a entregar en concesión a las entidades privadas los centros de información y educación ambiental.