“La imagen negativa de la curia es injusta”
LA SILLA DE SAN PEDRO, VACANTE ENTREVISTA C e l s o Morga, arzobispo secretario de la Congregación del Clero de la Santa Sede
Ciudad del Vaticano Enviada especial
minis- como el de Benedicto XVI, de apenas dos días. Creo que esta vez serán tres o cuatro días, y que habrá siete u ocho votaciones. Si me equivoco... ¡pues mejor!
Karol Wojtyla fue elegido en tres días, al octavo escrutinio.
Esa duración se explica también porque fue un salto muy grande, el primer no italiano en siglos.
En cierto modo, sería el mismo escenario de salto si ahora toca un papa no europeo.
Puede ser. Me imagino una cosa así, como con Juan Pablo II, pero nadie tiene elementos para afirmarlo. La mayoría de dos tercios exige 77 votos a favor, que no son pocos en un colegio electoral de 115. Veo fácil que determinados cardenales consigan 20 o 30 votos; hay varios que podrían. Pero de ahí a subir a 77 es otra cosa. Esperemos que sea relativamente breve. Son cosas del Espíritu.
Habla usted de las cosas del Espíritu Santo, pero están también las cuestiones humanas.
No son cosas distintas. En Teología decimos que la gracia no anula a la naturaleza, sino que la perfecciona. El Espíritu Santo no anula las distintas orientaciones del colegio de cardenales, sino que asiste en la elección del candidato más adecuado. Una institución que dura dos mil años, que ha resistido a todo tipo de crisis en su historia, te hace pensar que no puede ser sólo humana.
En la opinión pública ha cuajado una imagen negativa de la curia romana. ¿Cómo lo ve?
Se siente pena. Llevo aquí más de veinte años y puedo decir que esa imagen que se da de la curia es injusta. Pero, por otra parte, hay síntomas de que algo no funciona; eso es evidente incluso desde fuera. Entiendo que la gente esté preocupada, y que los católicos se sientan desconcertados. Como ocurre en todas las organizaciones humanas –y también en la Iglesia, aunque la Iglesia es mucho más que eso–, hay personas en la curia y su entorno que no se portan bien, o no responden a lo que debe ser ese servicio particular al Santo Padre, que supone fidelidad absoluta y profunda responsabilidad. Cuando eso falta, se producen estas situaciones. Pero que no se diga que en la curia romana nada funciona; hay muchas cosas que funcionan bien.
¿Reformar la curia será tarea prioritaria del nuevo papa?
Diría que sí, al menos en un primer momento de su pontificado. Yo espero que, sin olvidar que es pastor de la Iglesia universal, el
E L C Ó N C L A V E I N M I N E N T E
“En el cónclave de Benedicto XVI la candidatura era clara, ahora está abierta”
I N F O R M E S O B R E V A T I L E A K S
“Al futuro papa le tocará hacer un trabajo de clarificación; lo pide la opinión pública”
nuevo papa tome los informes que existen sobre la curia e intente hacer un trabajo de clarificación. No será fácil, pues son personas concretas, con defectos y virtudes; trabajan aquí, y hay por medio derechos laborales. Pero la opinión pública, dentro de la propia Iglesia, pide una clarificación y un reajuste en la curia. Creo que el futuro papa lo hará.
Al hablar de informes, ¿se refiere al de Vatileaks elaborado por los cardenales Herranz, Tomko y De Giorgi?
Sí, a ese me refiero. Pero está también el tema de la banca vaticana, el Instituto para las Obras de Religión (IOR). Es evidente que es el momento de abordar esos dos asuntos, aunque manteniendo una intensa labor pastoral.