Charles Maurras y el catolicismo

Este fecundo pensador que es Charles Maurras nació el 1868 en Martigues (Provenza), cerca de Marsella, y murió el 1952 en París. De joven, Maurras perdió la fe católica, pero valoró el cristianismo como un factor de rigor y seguridad. Por este motivo defendía el retorno a la tradición anterior a la Revolución Francesa.

En torno a los años veinte, Maurras tuvo influencia en algunos escritores catalanes; por ejemplo, D’Ors, Josep Pla, J.V. Foix. En el resto de España, su pensamiento (no su agnosticismo) fue recogido por la ultraderechista Acción Española y por Ramiro de Maeztu.

Sin duda, la agrupación política Ac- ció Catalana llevaba este nombre como eco de Action Française, que era la tribuna a través de la cual se expresaba Maurras. Este, paradójicamente, tenía como maestros a Renan, Taine y Compte junto a grandes conservadores como Bonald o de Maistre.

Maurras siempre elogiaba la religión católica porque, como la monarquía (él se declaraba monárquico), representaba el orden y la seguridad.

C u r i o s a m e n t e , Maurras al principio era regionalista y amigo de Mistral, hecho que tuvo eco en Ca- talunya. En Francia influyó en dos generaciones de lectores, sobre todo en la clase media y en la aristocracia ilustrada.

Para Maurras, la Iglesia católica formaba una especie de sustrato de la identidad nacional y de la grandeur. Su juego ideológico fue finalmente combatido. Roma condenó en el 1926 sus doctrinas. La excomunión no le fue levantada hasta 1939.

En Catalunya, el doble juego de Charles Maurras fue denunciado especialmente por el canónigo Carles Cardó, que en un

El doble juego de Maurras fue denunciado por el canónigo Carles Cardó

artículo en La Paraula Cristiana escribió: “Maurras ha falsificado la Iglesia católica para poderse llamar católico”.

Maurras fue el maître à penser del régimen de Vichy que hizo la paz con los alemanes. Esto le valió ser juzgado y condenado a muchos años de cárcel. En la posguerra, el gran divulgador de Maurras fue el periodista Manuel Brunet, a través del semanario Destino, y firmando “Romano”.

Maurras a Catalunya: elements per un debat (edición de Quaderns Crema y de Xavier Pla) recoge los frutos de unas apasionantes jornadas que se celebraron en Girona.

A. MANENT,