Las exportaciones crecen un 5% pero se estancan en Catalunya
Las empresas catalanas lideran el comercio exterior con un 25% del total
Las exportaciones españolas siguen creciendo a un ritmo más que aceptable, batiendo año a año sus propios récords y habiendo alcanzado en 2013 la cifra de 234.239 millones de euros gracias a un incremento del 5,2% sobre el ejercicio anterior. En Catalunya, sin embargo, la cifra del negocio exportador se congeló el año pasado en los 58.000 millones, a pesar de lo cual uno de cada cuatro euros que se venden en el exterior lo factura una empresa catalana (ver gráfico).
El secretario de Estado de Comercio, Jaime García Legaz, ofreció ayer un primer análisis de la balanza de pagos del 2013 satisfecho del crecimiento exportador, pero admitiendo el ligero freno experimentado en los últimos tres meses del año. García Legaz matizó al respecto que diciembre, aunque no en la misma medida que los tres primeros trimestres, experimentó una suave recuperación de las exportaciones con respecto a octubre y noviembre.
Sobre el aumento de las importaciones en ese último tramo del año pasado, el secretario de Estado apuntó que se debió principalmente a la inversión española en bienes de equipo, lo que consideró un indicador adelantado de la inversión de cara al inminente crecimiento de la demanda interna.
El máximo responsable de incentivar la actividad exportadora española
La reducción de las importaciones redujo la balanza de pagos hasta los 15.000 millones
quiso poner en valor las cifras obtenidas en 2013 estableciendo una comparación con el comportamiento de los grandes países de la zona euro: en Francia descendieron un 1,6%, en Italia bajaron un 0,1% y en Alemania sólo crecieron el 0,2%, en línea con lo sucedido en Catalunya.
El nuevo récord exportador no ha hecho posible, sin embargo, equilibrar la balanza de pagos. Aunque en algunos meses llegó a ser positiva, el saldo entre exportaciones e importaciones siguió siendo negativo para España el año pasado en 15.955 millones de euros, “la mitad que en el 2012”, según expuso García Legaz. El problema crónico de la economía española en ese ámbito es la fuerte dependencia de los recursos energéticos. Más del 20% de las importaciones del 2013 –alcanzaron el valor total de 250.195 millones de euros– lo fueron de petróleo y sus derivados, de gas y de carbón.
Tratando de apuntalar las buenas perspectivas que llevan al Gobierno a prever un incremento de las exportaciones similar este año, el secretario de Estado contó que las empresas españolas que venden productos en el exterior crecieron en el 2013 un 10% y alcanzaron la cifra de 143.000. De ellas, cerca ya de 50.000 exportan de una forma regular. Además, el tipo de ventas en el exterior está evolucionando hacia productos de contenido tecnológico medio y alto, lo que en opinión del Gobierno va en la buena dirección de cara a modificar el modelo productivo hacia uno más sólido.
También mejora la competividad de las empresas españolas merced a la constante reducción de los costes laborales medidos en precio por unidad de producto. Todo ello está ayudando a que España haya comenzado a devolver su fuerte deuda externa, lo que en opinión de García Legaz constituye un “proceso fundamental para afianzar las recuperación económica”.