A por el tren del gran sur
‘Neutrógena’ y ‘Cheminées Poujoulat’ abren hueco en cabeza
Cheminées Poujoulat y Neutrógena son ahora los líderes de la Barcelona World Race, tras el abandono del Hugo Boss, y se han enzarzado en una intensa batalla por alcanzar el chorro de viento del noroeste que les lleve cuanto antes al cabo de Buena Esperanza, en el extremo sur de África, y a entrar en el océano Índico. Los dos veleros se encontraban en la tarde de ayer separados por 28 millas y empezaban a distanciar claramente a sus perseguidores, con el Gaes Centros Auditivos, tercero, a 137 millas.
Los dúos formados por Bernard Stamm-Jean Le Cam y Guillermo Altadill-José Muñoz se encuentran ya en la latitud de Buena Esperanza pero todavía muy cerca del continente sudamericano y han estado bordeando el anticiclón de Santa Helena (el equivalente al de las Azores en el Atlántico norte) para mantener una buena velocidad. Altadill y Mu- ñoz quisieron utilizar el pasado viernes el “modo invisible” (esto es, desaparecer de las pantallas de posiciones durante 24 horas) para que el Chimenées Poujoulat no viera en qué momento viraban hacia el este, pero al final se supo que el sistema no había funcionado y que el resto de la flota había tenido localizado al Neutrógena todo el tiempo. La dirección de regata se ha disculpado por este problema técnico y estudia las opciones para compensar al Neutrógena.
Entre los siete barcos que siguen en regata, la posición del Re
nault Captur es la que ofrece grandes dosis de intriga sobre sus posibilidades. Jörg Riechers y Sébastien Audigane se encuentran 124 millas por detrás del Gaes y 273 millas por delante del
We Are Water, aunque mucho más al este que los demás, cerca del anticiclón de Santa Helena, de manera que, por un lado, podrían acortar mucho la travesía hacia el Índico pero, por otro, podrían encontrarse sin viento. “Yo estaría feliz si hubiéramos ido más hacia el oeste –confesaba ayer Riechers–. La única cosa que podemos hacer es ir tan rápido como nos sea posible, con esperanza y rezando para que la siguiente zona de transición no sea demasiado grande”.