El PP y el PSOE se conjuran para mantener vivo el sistema bipartidista
Santamaría pone en valor el acuerdo entre los partidos “llamados a sucederse”
Una conversación del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy y el líder del principal partido de la oposición, Pedro Sánchez, sirvió para dar un impulso al pacto de lucha contra el terrorismo yihadista. El pacto de Estado, que se firmará el lunes, tiene un alto valor político en si mismo, como todos los de este tipo. Pero además permite visualizar una estrategia común del PP y el PSOE: mantener vivo el sistema de alternancia entre los dos grandes partidos ante la emergencia de fuerzas cuya prioridad declarada es poner fin al bipartidismo.
Que ese es un objetivo compartido, lo ponen de manifiesto los socialistas apostando al apostar por esas políticas de Estado que no gozan ahora de gran aplauso, y en una materia tan básica como la lucha contra el terrorismo, pese a las críticas que le puedan llover; y, a su vez, el Gobierno al reconocer como interlocutor y partido con capacidad de gobernar a su tradicional adversario. La vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, lo evidenció ayer, al hablar del acuerdo antiterrorista, de la importancia que “los partidos llamados a sucederse en el Gobierno” coordinen esa política contra los violentos.
El terrorismo yihadista preocupa y mucho al Gobierno, que sabe que el apoyo de la oposición es parte sustancial de la lucha antiterrorista. El mejor ejemplo de ello es el plan para luchar contra la radicalización violenta del terrorismo yihadista, que ayer aprobó el Consejo de Ministros.
El titular de Interior, Jorge Fernández Díaz subrayó la importancia de crear este marco de actuación para las instituciones públicas y diferentes colectivos de la sociedad civil. El Ejecutivo se compromete a plantar batalla al relato yihadista difundiendo una contranarrativa a su mensaje violento, principalmente en internet, y creará grupos locales en cada municipio para la rápida detección de posibles conflictos.