Una madre de excesivo coraje
BALTIMORE ha vivido esta semana una verdadera batalla campal tras la muerte de otro ciudadano negro a manos de la policía. Una furia desatada arrasó el downtown de esta ciudad del estado de Maryland, donde el 20% de las familias viven por debajo del nivel de pobreza y uno de cada cuatro habitantes no ha cumplido los 18. En mitad de las protestas ha emergido una nueva heroína americana: Toya Graham, que el país denomina la madre del año. ¿Cuál fue la heroicidad de esta mujer soltera, madre de seis hijos? Descubrir en televisión a uno de ellos embozado con un pasamontañas, participando de los destrozos, antes de irlo a buscar al corazón de los disturbios para llevárselo a casa. Las imágenes de la madre enfurecida agarrando al adolescente por el pescuezo y golpeándole repetidamente mientras le echa una reprimenda fueron grabadas por la cadena ABC 2. El país se ha emocionado con la madre coraje de Baltimore, a la que el comisario de la localidad, Anthony Batts, ha alabado ante la prensa, diciendo que ojalá muchos padres hicieran lo mismo en tal circunstancia y se preocuparan de dónde pasan la noche sus hijos.
La historia se ha viralizado rápidamente en las redes sociales y es uno de los vídeos más vistos en las últimas veinticuatro horas. Las imágenes muestran la ira desbocada de la madre contra el muchacho, hasta el punto de que uno acaba preocupado por la salud del menor (le golpea repetidamente en la cabeza), que obedece a su progenitora sin revolverse. Lo edificante del relato es que la mujer reaccionó para llevar a su hijo por el buen camino, lo preocupante es que ejerciera su autoridad a puñetazos.
Es ejemplar que una madre luche por sus hijos, pero no resulta imprescindible que combata contra ellos.