Iberdrola gana 841 millones hasta marzo y estudia el cierre de centrales
La eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán eleva sus ventas en un 5,5%
Iberdrola, la primera eléctrica española y quinta mayor empresa del Ibex con casi 40.000 millones de euros de valoración, obtuvo un beneficio neto de 841 millones en el primer trimestre del año, un 0,7% menos que en el mismo periodo del 2014. El incremento de un 9% del beneficio bruto de explotación (ebitda) hasta los 2.136 millones no fue suficiente para evitar el estancamiento del resultado final respecto a los tres primeros meses del año pasado, cuando se registraron importantes beneficios extraordinarios por la venta de la participación en la portuguesa EDP.
Según la información remitida ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en los tres primeros meses del año la eléctrica facturó 8.781 millones de euros, un 5,5% más, en un periodo en el que la producción eléctrica del grupo cedió un 7,6%. Desde la reforma del sector energético que ha marcado la legislatura para el sector, Iberdrola insiste en que la incertidumbre regulatoria y los recortes de la parte regulada del recibo de la luz –en especial, todo lo referente a la generación y distribución– empujaban a las empresas a centrarse en los negocios en el exterior y ser prudentes (o replegarse) con el negocio en España.
Ayer, Iberdrola explicó que to- mará una decisión acerca del cierre de centrales de ciclos combinados de gas una vez reciba la autorización del Ministerio de Industria, Energía y Turismo, y lo hará en función de la evolución de la demanda de electricidad, indicó el presidente de la compañía, Ignacio Sánchez Galán, en una conferencia con analistas.
“Ya hemos pedido cerrar algunas plantas. Si se aprueba, dispondremos de tiempo para decidir si se cierran o no en función de la evolución de la demanda”, afirmó Galán, quien recordó que el sistema eléctrico adolece de “sobrecapacidad” de potencia, si bien ya se está detectando un aumento del consumo.
El presidente de la compañía indicó además que el efecto del cierre de las plantas podría oscilar entre 80 y 100 millones de euros por cada instalación, si bien estas cifras “dependen del momento y de cada situación”. “En todo caso, no se ha tomado una decisión definitiva”, señaló. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ya
La compañía prevé culminar la compra de la estadounidense UIL Holdings en el último trimestre de este año
ha dado el visto a las peticiones de cierre de la central de Endesa de Foix y de la de Iberdrola en Castellón, con lo que la clausura queda solo pendiente del visto bueno de Industria. Previsiblemente, a la vista de los informes favorables de Red Eléctrica de España (REE) y de la CNMC, el ministerio procederá a autorizar los cierres. Por último, Iberdrola prevé culminar en el último trimestre del año la fusión con la eléctrica estadounidense UIL Holdings, adquirida en febrero por 2.650 millones de euros, y presentar los nuevos planes para el grupo a principios de 2016. Ayer, Iberdrola cayó un 1% en bolsa, la mitad que el Ibex.