Pugna por el control antiterrorista
Un informe confidencial que reposa sobre la mesa de uno de los despachos de la Moncloa concluye que “las imputaciones contra funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía” hechas por los Mossos sirvieron a la policía autonómica “para darse a conocer a nivel internacional como la policía de referencia de Catalunya para la lucha contra el yihadismo, y de esta manera que le abrieran las puertas de Europa a nivel de Interpol, Europol, Sirene, y demás organismos internacionales con la vista puesta en el establecimiento de estructuras de Estado a nivel de la Unión Europea”. El dossier, en el que se analiza el caso pormenorizadamente, ha sido elaborado por agentes de inteligencia policial del Ministerio del Interior. Para los redactores del documento, “esa es la génesis de todo su enfado (de la cúpula de los Mossos) y por lo que deseaban por encima de todo ejecutar la operación sin que apareciera en ningún momento ni el CNI ni la Policía Nacional”. Los analistas se apoyan, entre cosas, en discursos del comisario jefe de los Mossos, Josep Lluís Trapero, y del conseller deInterior, Ramon Espadaler, du- rante el acto central del día de las Esquadres. Trapero comentó, según el informe, que necesitaban presencia “de la policía autonómica en los diferentes foros internacionales”. El conseller, se recuerda en el documento, solicitó “la adecuación de leyes obsoletas del Estado central para que dicha policía (los Mossos) pueda mantener relaciones de Estado con demás países europeos”. En el informe se llega a la conclusión de que es la propia Generalitat, desde alguna de sus instancias, el origen de la filtración que ha estimulado la última polémica.