Votar sirve de algo
Termina la campaña electoral y, con ello, acaba la preocupación que ha inundado a los políticos por sus ciudadanos. Esa que deberían tener los cuatro años de la legislatura pero sólo es palpable en campaña electoral. Todos conocemos estas tácticas y las criticamos. Lo lógico sería encontrar esta indignación reflejada en los resultados electorales, y nos encontramos normalmente con todo lo contrario. Y me pregunto: ¿De qué sirve quejarse si no se plasma en la acción? ¿Para qué existe el sufragio universal si no es para expresar nuestra opinión y elegir a nuestros representantes?
Los políticos están ahí por nuestro voto. Así pues, si la mayoría no está de acuerdo con su forma de hacer las cosas, es fácil la solución. Vota a otro partido. No entro en cuál, el que más se acer- que a tus ideales. Somos los principales culpables de sus actos por elegirlos y el cambio está en nuestras manos. Y a todos aquellos que no ven utilidad al voto quiero invitarles a que vuelvan a tener esperanza. Es lo único que podemos hacer y no cuesta nada.
Animo a todos los que no están de acuerdo con la forma de hacer las cosas a que hagan factible el poder que tienen mediante el voto y acompañen esas quejas con acciones.
C. YANATI MOHAMED
Madrid