Las candidatas
Esperanza Aguirre y Manuela Carmena protagonizan hoy la disputa por la alcaldía de Madrid. La popular se ha dado cuenta que la jueza jubilada se ha convertido en un icono para la izquierda y la ha atacado por tierra, mar y aire, con una desinhibición tan hiriente como irregular ha sido el desvelamiento de su declaración de la renta. El juego en la capital de España es cosa de estas dos mujeres de perfiles distintos pero de materiales parecidos: aleaciones metálicas resistentes, trayectorias personales dilatadas, capacidad de sufrimiento y vocación política, Carmena ha seguido una vereda distinta a la de Aguirre pero siempre en los linderos de lo público; Aguirre se encuentra ante su última oportunidad. Las dos se juegan el todo por el todo.