Renuncia el policía de Texas que apuntó a chicos negros
El altercado en una piscina retrata el racismo en EE.UU.
Nueva York. Corresponsal Ser de raza blanca no significa ser transparente. Así lo indican las leyes de la física. Muchas veces, esas leyes guardan poca o ninguna relación con las conductas colectivas y los prejuicios sociales
“Ni siquiera me miró, fue como si yo fuera invisible”, declaró Brando Brooks. Era uno de los pocos, sino el único, de los blancos que había en el lugar. “En las imágenes se puede observar como el policía pasa de mí y se dirige sólo a mis amigos negros”, añadió este adolescente de 15 años.
A Brandon Brooks, el invisible, se debe el vídeo de la fiesta de la piscina del pasado viernes en la localidad texana de McKinney. Su grabación ha evidenciado de nuevo la brutalidad policial. Además de poner al descubierto una realidad tantas veces esquivada: la división racial en este país.
McKinney es uno de esos suburbios, a unos 50 kilómetros al norte de Dallas, donde no gusta el exceso de nuevos residentes afroamericanos, por lo general de peor condición económica.
En esta ocasión no hubo muertos. Pero la escena del agente Eric Casebolt, pistola en mano amenazando a unos críos, que luego reduce sobre la hierba a una chica de 14 años a la que no deja de insultar mientras ella pide el auxilio de su madre, retrata el conflicto como pocas veces.
Casebolt, de piel blanca, presentó el martes su renuncia al cuerpo. Ingresó en el 2005, después de haber estado en los marines y en la guardia nacional del estado. Fue distinguido como po- licía del año 2008. “Su acción carece de defensa”, afirmó el jefe de la policía local, Greg Conley. “Estaba fuera de control”, añadió.
“Nuestras políticas y nuestro entrenamiento no apoyan esa actuación”, insistió. Casebolt y cuatro compañeros tuvieron una denuncia en el 2007 por prejuicios racistas, aunque no prosperó.
“Otros once agentes se desplazaron a la piscina y se comportaron según nuestras prácticas”, remarco el jefe. Su marcha voluntaria no acarrea a Casebolt ninguna disculpa. En principio mantendrá su pensión y los beneficios por su trayectoria.
La grabación provocó que centenares de personas salieran a la calle a manifestarse y a reclamar que se abra una causa judicial. Sin embargo, como señala el Dallas Morning News, hay voces que califican de “héroe” al agente.
Todo apunta que los uniformados se desplazaron al lugar por la llamada de un vecino, que alertó de supuestos alborotos. Una afroamericana, identificada como Tatiana y que se atribuye la organización de la fiesta, explica en YouTube que la pelea empezó porque una mujer blanca le agarró y le gritó “regresa a la sección ocho”. Esa parte se encuadra al este de McKinney, donde se han edificado los pisos de protección para los vecinos de rentas bajas.
La ciudad tiene unos 150.000 censados. El pasado año fue reconocida como el mejor sitio para residir en Estados Unidos. Los in- gresos medios se sitúan en 96.000 dólares anuales por familia. El índice de criminalidad es bajo. Pero su expansión está siendo rápida. En el 2000 contaba con 54.300 residentes.
El 75% de los habitantes son blancos y los negros son el 11%.
El ayuntamiento afrontó una demanda en el 2009 en la que le acusaron de obstaculizar la construcción de vivendas asequibles en la zona oeste. En esa zona, de predominio blanco, se ubica la piscina de la discordia.
El incidente se registró en la zona blanca de McKinney, ciudad de creciente población negra