El agravio al catalán, a examen
La prueba de Historia de las PAU actualiza el Memorial de Greuges de 1885
En lo que algunos podrían interpretar como declaración de intenciones o gesto simbólico, especialmente por el actual contexto político y social, el examen de Historia de las PAU (pruebas de acceso a la universidad) propuso ayer a los estudiantes analizar las raíces del catalanismo a partir del Memorial de Greuges entregado a Alfonso XII, en 1885. Frente a los alumnos, mucho menos nerviosos ayer que en el primer día de las PAU, el agravio sufrido dos siglos atrás por el catalán, desterrado de las escuelas o los tribunales y relegado solo al ámbito doméstico.
El catalanismo a examen justamente ahora, en medio de la polémica abierta entorno al ministro de Educación, José Ignacio Wert, y su política lingüística. “No tenemos, Señor, la pretensión de debilitar, y aún menos de atacar, la gloriosa unidad de la patria española”, arrancaba el fragmento escogido del Memorial de Greuges. Y seguía: “Todo lo contrario, la queremos fortalecer y consolidar; pero entendemos que para conseguirlo no es buen camino ahogar y destruir la vida regional para sustituirla por la del centro”.
La prueba, en el último día de exámenes de las materias comunes, sacó a relucir un texto que reivindicaba el uso del catalán en todos los ámbitos. “Solo podemos usar nuestra lengua en nuestros hogares y en conversaciones familiares; desterrada de las escuelas, lo ha sido más tarde de la contratación pública y también de los tribunales”, relataba.
Catalunya viajó así, gracias a las pruebas de la selectividad, más de 200 años atrás, entre la opresión del Gobierno español y la influencia del Estado francés. En el texto seleccionado del Memorial de Greuges emergía también la contribución de los catalanes a la industria española, “a base de trabajo y privaciones de todo tipo”, y la pérdida de un sistema administrativo propio “para ser sustituido primero por el sistema castellano, y ahora por una copia imperfecta y viciosa del sistema francés”.
Aquel documento de denuncia contra el centralismo español, el primer acercamiento claro de la burguesía catalana al catalanismo, no proponía la ruptura, sino que tendía la mano a España. “Lo que nosotros queremos, Señor, es que en España se implante un sistema regional adecuado a las condiciones actuales y parecido a al-
El documento, entregado a Alfonso XII, reivindicó el uso de la lengua catalana La guerra de Cuba, la batalla del Ebro y el franquismo, otros de los temas para nota