Junio de exámenes finales para el legado presidencial
La aprobación de la ley de la “vía rápida” para los acuerdos comerciales internacionales es el primero de los exámenes finales a que se somete este mes de junio el legado del presidente Obama. La Casa Blanca y los analistas de referencia en Washington coinciden en que la presidencia de Obama se escribirá en los libros de historia como el éxito del primer presidente negro o como un fracaso también de trascendencia histórica según lo que ocurra de aquí al día 30 y prácticamente ninguna de las asignaturas pendientes dependen ya del presidente. En política interior, se conocerá este mes la sentencia del Tribunal Supremo sobre la reforma sanitaria, conocida ya en el mundo entero como el Obamacare, y que se ha convertido en la imagen de marca de la presidencia de Obama. Que el Supremo la avale o la suspenda determinará el balance del presidente. En política exterior, el día 30 finaliza el plazo para cerrar definitivamente el acuerdo nuclear con Irán, afectado no sólo por las reticencias de israelíes y las monarquías del Golfo, sino también y sobre todo por la mayoría republicana en el Congreso. Y por si fuera poco, el secretario de Estado John Kerry, que lidera la negociación, convalece de una fractura de fémur. La reforma migratoria, impugnada por los gobernadores republicanos, y que afecta a cinco millones de inmigrantes sigue pendiente del tribunal y este mismo mes el Supremo decidirá si las bodas gays son un derecho de competencia federal o dejará que cada estado legisle por su cuenta.