La pérdida del título no supone perjuicios en el proceso penal
La infanta Cristina nunca estuvo aforada y la va a juzgar un tribunal ordinario
La pérdida del título de duquesa de Palma de Mallorca por parte de la infanta Cristina no va a tener repercusión procesal alguna en la causa que se sigue contra ella por el caso Nóos. Otra cosa son los efectos en términos de opinión pública, en un proceso en el que este factor ha cobrado una gran trascendencia, como ocurre en todos los que se siguen contra personas que, por el motivo que fuere, tienen especial relevancia social.
El propio abogado de la infanta, Miquel Roca, manifestó ayer que la hermana del Rey le preguntó si la pérdida o la renuncia al título de duquesa podría perjudicarla en el terreno judicial. Pero la infanta no ha gozado de fuero específico, y la prueba es que su caso ha sido investigado por un juez de instrucción de Palma, no por el Tribunal Superior de Baleares ni por el Supremo, como ocurre con los asuntos penales que afectan a parlamen- tarios, por ejemplo. Ninguna merma para el derecho de defensa se produce, por tanto, por esta decisión.
De hecho, Roca añadía ayer que la carta de renuncia de la infanta se ha enviado cuando ha considerado que “no tenía ningún tipo de sentido mantenerlo” y ante la creencia de que “esto podía generar un tipo de polémica social de la que ella quiere estar alejada”. Y en paralelo, el juez del caso Nóos, José Castro, se negaba ayer a dar opinión alguna sobre el hecho mismo y sobre la circunstancia de que la Casa del Rey haya explicado que la renuncia de la infanta llegó después de que el Rey le comunicara su decisión de retirarle el título. “No voy a opinar –dijo el magistrado– de lo que no me compete”. Es decir, de lo que no tiene incidencia ni repercusión en el proceso.
Tampoco variaría la situación si la infanta Cristina renunciara a sus derechos dinásticos. Esa es, obviamente, una cuestión de mayor calado, cuyos efectos habría que medir de nuevo principalmente en términos de repercusión en la opinión pública.