Los ‘bed & breakfast’ pagarán impuesto turístico
El Govern ultima una regulación para nuevas modalidades de alojamiento que afectará a albergues y autocaravanas
El Govern ultima una regulación para las nuevas modalidades de alojamiento turístico que, en algunos casos, están funcionando al margen de la legalidad, y que comportará que deban pagar el impuesto turístico además de cumplir toda una serie de normas. Se trata de los espacios que acogen autocaravanas, las habitaciones en viviendas compartidas –llamadas también bed & breakfast– y los albergues turísticos. Se trata de nuevas formas de alojar a visitantes que en los dos últimos casos han disparado su presencia en estos años, sobre todo en Barcelona.
El conseller de Empresa i Ocupació, Felip Puig, expuso ayer el futuro marco normativo que, en su opinión, es una apuesta “para acreditar los servicios turísticos que se ofrecen y exigirles calidad”. Al mismo tiempo, añadió el conseller, se ordenan y simplifican los distintos tipos de alojamientos turísticos, incluidas aquellas modalidades que hasta ahora quedaban al margen de la regulación y que promueven plataformas como Airbnb. “Una manera de evitar la economía sumergida y situaciones de indefensión del consumidor y degradación de la oferta”, dijo el conseller. Estas nuevas modalidades pagarán un importe mínimo de 0,65 euros en Barcelona y 0,45 en el resto de Catalunya.
Una de las principales novedades afecta a las habitaciones en vivienda compartida. Según la futura normativa, para poder ofrecer este tipo de alojamiento el titular de la actividad debe ser el propietario de la vivienda, ha de estar empadronado y pernoctar durante la estancia del visitante. Así, el propietario se convierte en el responsable de las infracciones y del incumplimiento de las obligaciones definidas en la normativa turística, de vivienda, consumo y municipal.
Otra de las cuestiones que estarán reguladas es el número de habitaciones que el titular de la vivienda puede poner en régimen de alquiler. No podrán ser más de dos y, como máximo, durante cuatro meses del año. Además, el número de personas que se alojen en la vivienda no podrán superar lo que establezca la cédula de habitabilidad. La normativa también incide en la tipología y servicios mínimos que deben ofrecer este tipo de nuevos alojamientos. Así las cosas, se prevé que estas deban tener ventilación al exterior y estar suficientemente amuebladas. El titular deberá permitir el uso al baño y sólo prestar servicio de desayuno.
Otro de los alojamientos que pasarán a estar regulados son los albergues. Una de las modalidades que, junto con los bed & breakfast, más ha crecido en estos últimos años. Estos establecimientos, que prestan servicios en dormitorios de capacidad múltiple, tendrán una categoría única.
La Generalitat también ha decidido regular las denominadas áreas de acogida de autocaravanas, espacios de terreno delimitados para la ocupación exclusiva de estos vehículos en tránsito a cambio de una contraprestación económica. Estos espacios no admiten elementos fijos como bungalows o módulos y
Estos alojamientos dejarán de estar al margen de la legalidad y se evitará la economía sumergida
permiten una estancia máxima de 48 horas. “Se trata de una infraestructura con una demanda muy alta, sobre todo para turistas que provienen de países del norte y centro de Europa que hacen ruta”, dijo Felip Puig.
La normativa identifica ocho modalidades de alojamiento turístico: los hoteles, albergues, apartamentos, casas de turismo rural, viviendas de uso turístico, campings, habitaciones en piso compartido y áreas de autocaravanas. También dotará a la administración de nuevos instrumentos jurídicos y procedimientos para perseguir la actividad ilegal.