El impacto del gasto social aviva el combate electoral entre PP y PSOE
Los socialistas acusan a Rajoy de haber recortado cinco puntos en ayudas sociales El PP justifica la aprobación del presupuesto en verano para evitar un “limbo”
La partida del presupuesto que se destina a gasto social enfrentó ayer al PP y al PSOE. Mientras el portavoz adjunto del PP, Antonio Gallego, consideró que aprobar las cuentas evita que España entre en un “limbo presupuestario”, el portavoz parlamentario del PSOE, Antonio Hernando, acusó al Gobierno de reducir cinco puntos el peso del gasto social en los presupuestos desde 2011.
Para Gallego, que el Ejecutivo de Mariano Rajoy elabore unos presupuestos para 2016 transmite “confianza y estabilidad” a los mercados, a los ciudadanos y a los socios de la Unión Europea. El portavoz del PP opinó que las cuentas del 2016 están elaboradas como las del resto de la legislatura, “con responsabilidad, coherencia y seriedad”.
Por su parte, Hernando se preguntó por qué “si todo va tan bien” se sigue “castigando” a los desempleados y a los pensionistas. Detalló que en el 2011 el gasto social suponía el 58% del total de las cuentas públicas y en el 2016 será “sólo” el 53,5%. Auguró que a Rajoy no le saldrá bien su intento de dejar todo “atado y bien atado para el futuro” y, así, “hipotecar al próximo Gobierno”.
El Gobierno aprobó el viernes los presupuestos más atípicos de los últimos diez años. Se trata de las primeras cuentas públicas presentadas en el mes de julio, cuando habitualmente se daban a conocer el último fin de semana de septiembre para aprobarlas las últimas semana del año. El Ejecutivo de Mariano Rajoy ha adelantado más de sesenta días su tramitación de cara a las próximas elecciones generales. Además, durante los últimos años no se hablaba más que de ajustes y de recortes para los ciudadanos. Y en esta ocasión, con un carácter más expansivo, se vislumbran los primeros indicios de recuperación de la economía del país.
El calendario arrancó el pasado viernes con su aprobación en el Consejo de Ministros. Fue el propio Rajoy quién ofreció las principales pinceladas desde La Moncloa. Hizo balance económico y político aprovechando el fin del primer semestre del 2015. La primera mitad de su intervención la dedicó a ha- blar de la mejoría de las cifras macroeconómicas: PIB, exportaciones, consumo, paro… La otra mitad, fue política, con el foco puesto en Catalunya.
Esa primera aproximación a los presupuestos se hizo desde el salón de Tapices, reservado para comparecencias presidenciales. En primera fila se encontraban sentados Álvaro Nadal (jefe de la Oficina Económica del Gobierno) Jorge Moragas (jefe de gabinete de Presidencia), Cristóbal Montoro (ministro de Hacienda y Administraciones Públicas) y Soraya Sáenz de Santamaría (vicepresidenta del Gobierno). La propia escenografía demostró que el Ejecutivo tiene prisa para su trámite.
Rajoy aseguró que “con estos presupuestos se cierra una etapa dificilísima para todos los españoles y se abre un nuevo periodo de crecimiento sostenido y de intensa creación de empleo”.
El próximo hito será el próximo martes, día 4, en el Congreso. Ese día, Montoro y sus tres secretarios de Estado –Marta Fernández Currás (Presupuestos y Gastos) Miguel Ferre (Hacienda) y Antonio Beteta (Administraciones Públicas)– ofrecerán los detalles a la prensa, desde la sala de Columnas de la Cámara Baja. Previamente, Montoro habrá entregado al presidente de la Cámara, Jesús Posadas, en el Salón de los Pasos Perdidos, el proyecto de ley. Ahí, se iniciará la tramitación. La oposición y las comunidades autónomas tendrán unos días para el análisis. Empezarán las negociaciones entre los distintos grupos y alguna posible modificación a través de enmiendas.
Se prevé que los secretarios y subsecretarios de Estado del área
Hernando acusa a Rajoy de reducir el peso del gasto social en 5 puntos desde el 2011 Gallego justifica las cuentas públicas en verano para evitar un “limbo presupuestario”
económica, así como el gobernador del Banco de España, Luis María Linde, pasen hacia mediados de agosto por el Congreso para dar sus valoraciones de los mismos. El calendario que expone el portavoz de Economía del PP en el Congreso, Vicente Martínez-Pujalte, es que entre el día 18 y 20 se lleven a cabo esas comparecencias. Entre el 25 y 26 de agosto se debatirá la totalidad y dos días después acaba el plazo para incluir enmiendas.
De ahí, las cuentas se debatirán en la comisión de presupuestos entre la primera y segunda semana de agosto, aunque lo más probable es que sea la primera. Y la segunda, se aproveche para el debate en el Pleno del Congreso. De ahí, se irán al Senado. La Cámara Alta tiene aproximadamente un mes para su estudio e incluso añadir alguna modificación. Hacia mediados de octubre regresarán al Congreso, donde se volverá a debatir sobre los mismos en el pleno. Y ya de ahí, al Boletín Oficial del Estado (BOE).