Mas niega que pactara con Colau el tranvía por la Diagonal
El president matiza que acordó con la alcaldesa unir las dos líneas, pero no por dónde
El acuerdo sobre el tranvía de la Diagonal, anunciado tras el encuentro entre Artur Mas y Ada Colau, disgustó a Xavier Trias, que se había opuesto al proyecto.
El culebrón político en torno al tranvía por la Diagonal (un embrollo cuyos orígenes se remontan a hace ya más de diez años, cuando la entrada en servicio del Trambaix y el Trambesòs puso ya sobre la mesa la necesidad de conectar las dos líneas para hacer las más eficaces y rentables) sigue quemando capítulos. El penúltimo lo escribió el president de la Generalitat. Artur Mas, cuando a última hora del viernes, en un acto de partido (la escuela de verano de la Joventut Nacionalista de Catalunya) matizó, y de qué manera, el aval que la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, había obtenido el pasado jueves del máximo mandatario catalán a su proyecto de conectar los dos tranvías a través del camino más corto, el tramo central de la Diagonal.
El anuncio de ese supuesto apoyo a la iniciativa de Ada Colau, dado a conocer por la propia alcaldesa al término de su entrevista con el presidente de la Generalitat, y ratificado minutos después por la vicepresidenta y portavoz del Govern, Neus Munté, sacudió los cimientos del grupo municipal de CiU. No en vano, el anterior alcalde y actual jefe del principal grupo de la oposición, Xavier Trias, había descartado absolutamente completar el sistema tranviario por la Diagonal, cuyo tramo central (entre Francesc Macià y paseo de Gràcia) reformó en la recta final de su primer y único mandato Fue un golpe bajo que, según algunas fuentes convergentes, dejó en estado de shock al equipo de Trias. Muchos interpretaron, con motivos, la deferencia de Mas hacia Colau como la contrapartida del apoyo cada vez más inequívoco de la alcaldesa al derecho a decidir (que no a la independencia de Catalunya).
El jueves, el grupo municipal de CiU no hizo público su comunicado (crítico) sobre el supuesto acuerdo Mas-Colau hasta cinco horas después de que Munté ratificará la versión de la alcaldesa. Trias y los suyos necesitaron su tiempo para convencerse de lo que acababan de oír, de la traición que acababan de sufrir. Por una vez, no estaban dispuesto a transigir, ni siquiera ante el president, ni a renunciar a unos principios que vienen defendiendo desde los preliminares de la consulta para la reforma de la Diagonal. Cierto es que aquel referéndum no se planteó como un dilema tranvía sí-tranvía no, pero también es verdad que las dos opciones que contemplaban la ocupación de esta avenida por este medio de transporte fueron derrotadas en una consulta que despertó mucho más interés entre los medios de comunicación que entre la ciudadanía, que no se sintió especialmente motivada a pasar por las urnas.
También el Govern de la Generalitat tardó su tiempo –mucho tiempo, nada menos que un día y medio– en deshacer el entuerto provocado el pasado jueves. Para ello fue necesario que desde el grupo de CiU en el Ayuntamiento se hiciera llegar al president la conveniencia de tratar de reparar el daño provocado. Y fue el propio Mas el encargado de hacer el remiendo. “La Generalitat –dijo en las colonias convergentes de Sant Esteve de Palautordera– siempre ha estado de acuerdo en conectar los dos tranvías” (una verdad como un templo). Pero matizó: “de que se hiciese a través de la Diagonal ni siquiera se habló. Y no se habló porque, simplemente, la Generalitat no tiene nada que ver de por dónde tiene que pasar la conexión de los tranvías”. Ni la número dos del Govern ni la gente de Trias lo entendieron así. Desconexión absoluta.
Quien sí reiteró la primera versión de lo sucedido en la entrevista mantenida por Artur Mas y Ada Colau en el Palau de la Generalitat fue el gobierno municipal de Barcelona. Lo hizo ayer la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, quien afirmó que “la información que le hemos hecho llegar a Mas desde el Ayuntamiento ha sido siempre la misma”. Janet Sanz insistió en lo que todos, hasta la vicepresidenta Neus Munté entendieron el jueves por la mañana, que sí hubo aceptación del proyecto de unir los tranvías por la Diagonal por parte del Govern de la Generalitat.
El president dice que no se habló de por dónde unir las líneas; ni Munté ni Trias lo entendieron así