Cecil ruge en Nueva York.
Zimbabue dice que la cacería se celebró antes que la de Cecil
Una imagen del león Cecil se proyectó ayer en el Empire State; mientras tanto, afloran más casos de cazadores furtivos en Zimbabue.
Las autoridades de Zimbabue acusaron ayer a otro ciudadano estadounidense de cazar de forma ilegal a otro león, meses antes de que otro compatriota, el dentista Walter Palmer, abatiera a Cecil, el felino más popular del país africano. La muerte de este animal ha levantado tal ola de solidaridad que ayer se le homenajeó con una proyección en el Empire State Building.
Jan Casmir Sieski, de Pensilvania, está acusado de haber participado en la cacería ilegal de un león el pasado abril, según informó ayer la Autoridad de los Parques y Vida Salvaje de Zimbabue (ZPWMA, en sus siglas inglesas).
Tras la polémica desencadenada por la muerte de Cecil, el sábado un grupo conservacionista informó de que su hermano, Jericho, también había sido abatido, pero esta información fue desmentida ayer por el citado grupo, así como por los investigadores del parque, que vigilan la manada controlada por GPS. Según estos, Jericho está bien y “ha adoptado” a los cachorros de Cecil. E incluyeron una foto del animal en el Twitter de la Universidad de Oxford. El error de esta información se debe a la muerte de otro león, que habría muerto un día después que Cecil, el 2 de julio, y en la misma zona a manos de otro furtivo, cuya nacionalidad no ha sido revelada.
Aunque las autoridades de Zimbabue todavía no han confirmado esta segunda muerte, sí han admitido que se ha detenido a otro acusa- do, vinculado a un segundo caso de caza ilegal.
En relación a este caso, Zimbabwe ha informado de la detención de un ciudadano suyo, Headman Sibanda, acusado de dirigir la cacería ilegal, según los datos facilitados por Zpwma. “Se ha detenido a Headman Sibanda, acusado de violar las regulaciones de caza, al cazar sin permiso en su granja –Railway Farm 31–. También es el dueño de Nyala Safaris, que organizó la cacería”, explicó el citado organismo en un comunicado.
Tras la muerte de Cecil y la puesta de manifiesto de la actuación ilegal de cazadores adinerados, Zimbabwe ha anunciado que aplicará restricciones a la caza de leones, leopardos y elefantes, especialmente en las áreas que rodean los parques naturales, para evitar que vuelva a producirse lo que ocurrió con Cecil, que fue conducido fuera del parque para acabar con su vida.
“La caza de leones, leopardos y elefantes en las áreas que rodean el parque natural de Hwange –la reserva natural más grande de Zimbabue, en el oeste del país– ha sido suspendida con efecto inmediato”, dijo el director del organismo, Edison Chidziya.
Este tipo de caza sólo podrá llevarse a cabo con la autorización expresa del propio director y en compañía del personal del parque. Zimbabue cuenta con una población de cerca de 2.000 leones, de los cuales 70 son cazados de forma legal cada año, según fuentes oficiales.
El hermano de Cecil, Jericho, está vivo y cuida de los cachorros de su hermano, muerto por Palmer