Juntos, paseando por el jardín
Los Reyes, con la princesa Leonor y la infanta Sofía , ofrecen su primera imagen veraniega
La Reina y su hija Sofía lucieron el mismo modelo de blusón ibicenco, blanco con bordados Don Felipe asegura que la apertura de los jardines de Marivent al público debe hacerse con “normalidad”
Los jardines de Marivent se están convirtiendo en los protagonistas de las vacaciones reales. Desde que el nuevo gobierno balear decidiera pedir a la Casa Real la apertura al público del recinto durante diez meses al año, el Rey se los ha situado en primer plano. El viernes recibió a las autoridades baleares y ayer optó por un espacio ajardinado, situado en un lateral del palacio, con el mar de fondo, para ofrecer la primera imagen de verano, junto a la reina Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía.
A las siete y media de la tarde ( s’hora baixa, de acuerdo con la denominación mallorquina), los Reyes y sus hijas salieron del interior del palacio y los cuatro sa- ludaron, uno a uno, a los más de cincuenta representantes de los medios de comunicación concentrados para la sesión fotográfica. Después, pasearon por una zona ajardinada y también ante el tradicional fondo de la escalinata de acceso al palacio de Marivent.
A preguntas de los periodistas, don Felipe hizo referencia a la cuestión de la apertura al público de los jardines. “Hay que tratar el asunto con normalidad, estudiarlo bien porque no hay que dar ningún paso en falso. Organizarlo, como lo está haciendo el Govern balear, y colaborar para que todo se haga de la mejor forma posible”. También dijo don Felipe, ante la mirada atenta de la Reina y las dos niñas: “Ya sabéis que siempre hemos estado muy a gusto en Mallorca” y añadió “la gente es estupenda”.
Los periodistas también le preguntaron si tenía previsto regatear este verano, a lo que respondió afirmativamente aunque matizó que necesitaba un par de días para atender asuntos pendientes. El Rey no precisó si la afición a la náutica va a seguir en sus hijas y si éstas tenían previsto iniciarse en los cursos de Calanova: “Alguna vez, eso depende de ellas”, dijo, mientras la princesa Leonor le miraba y se encogía de hombros. Don Felipe tampoco concretó cuanto tiempo se quedarán en Mallorca: “Algunos días, no lo he- mos decidido, tenemos que ir improvisando”.
El Rey llegó a la isla el pasado jueves, junto a sus hijas, Leonor y Sofía, mientras la reina Letizia lo hizo el pasado viernes por la noche. Durante el fin de semana, los cuatro, han compartido Marivent y algunas excursiones por mar, con la reina Sofía, la infanta Elena y sus dos hijos, Felipe y Victoria, y Juan, Pablo, Miguel e Irene Urdangarin, hijos de la infanta Cristina, que ayer abandonaron la isla para reunirse con sus padres.
Ayer, por la mañana, don Felipe hizo una visita a las instalaciones del club náutico de Palma antes de que comenzarán las pruebas de la 34.º Copa del Rey
Mapfre. De momento, don Felipe, no ha participado en las regatas aunque lo hará en algún momento de esta semana. En el Ai
fos, un velero de la Armada, le guardan su puesto de patrón, siempre que la actualidad política le permita subir a bordo. Don Felipe, muy atento a los gestos, prefirió ayer permanecer en Marivent pero se prestó a acudir al club náutico consciente también de que su presencia activa el atención sobre la competición náutica. Durante su recorrido por el Náutico, don Felipe tuvo ocasión de conversar con quien se ha convertido en el héroe de la competición, Jacinto Rodríguez, el patrón del Duende, de 84 años, quien el pasado sábado permaneció más de cuatro horas en el agua, tras caer al mar cuando la embarcación navegaba desde Barcelona a Palma. Don Felipe saludó a Rodríguez, a quien las heridas de su odisea no le han quitado las ganas de participar en la prueba náutica, como lleva haciendo en los últimos años.