Trump reclama diez millones a José Andrés
El cocinero renunció a uno de los restaurantes del magnate
Al chef José Andrés, acostumbrado a moverse en la cocina entre las cazuelas, al calor de los fogones y el olor a sofrito, tal vez le resulten poco habituales las cuestiones judiciales.
Todo lo contrario le sucede al magnate y showman Donald Trump, conocido como The Donald. En su esfera, la cosa de los abogados y los tribunales forma parte de su mundo. En no pocas ocasiones se ha servido de la regulación de la bancarrota para forjar negocios. Al margen de divorcios, en otras ocasiones ha sido su ego el que le ha llevado a recurrir al pleito o la denuncia.
Durante años mantuvo viva una demanda contra un periodista que se atrevió a poner en duda su fortuna. La rebajó en unos cuantos miles de millones y eso le supo fatal. Perdió.
Esta misma razón ha provocado que ahora, cuando se postula a la presidencia de Estados Unidos por los republicanos, se haya enfadado con el exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg. Su agencia de noticias dedujo que su fortuna real asciende a poco más de 2.000 millones, lejos de los 10.000 que dice.
Así que, con todos estos antecedentes, que José Andrés se haya cruzado en su camino no deja de ser una raya más para el tigre.
De vuelta a los juzgados, Trump reclama al discípulo de Ferran Adrià una indemnización de diez millones de dólares . Le ha demando porque José Andrés rompió este pasado julio el acuerdo alcanzado para gestionar el restaurante de uno de sus más lujosos hoteles, todavía en construcción en Washington, muy cerca de la Casa Blanca.
El gran difusor de la cocina española en Estados Unidos emitió entonces un comunicado en el que sostuvo que no podía seguir colaborando con el magnate. “Las recientes declaraciones de Donald Trump que denigran a los emigrantes hacen que sea imposible para mi compañía y para mí continuar con la apertura de un restaurante español en el nuevo hotel”, anunció José Andrés en un comunicado. El asturiano gestiona 18 establecimientos en Estados Unidos.
En la presentación de su campaña electoral, el pasado mes de junio, Trump calificó de “criminales y violadores” a los ciudadanos de México que entran en Estados Unidos. Tras proponer la construcción de un gran muro, reconoció: “Es cierto, también viene alguno bueno”. Estos comentarios desataron el furor entre los hispanos de Estados Unidos y una queja formal de México.
En la réplica a la decisión del cocinero, el empresario alega que la negativa a gestionar el restaurante principal del Trump International Hotel le ha ocasionado “pérdidas y daños por valor de al menos millones”.
“Es curioso que el señor José Andrés se sienta ofendido por el hecho de que Trump comparta públicamente sus opiniones sobre inmigración, que han permanecido sin cambios durante muchos años. Es más que conocida la voluntad y franqueza del señor Trump para compartir sus opiniones en público”, señala el texto de la demanda interpuesta el 31 de julio ante el tribunal del Distrito de Columbia.
Pese a que, como le recuerdan en ese escrito, el cocinero elogiara a Trump por “su visión para los negocios” y se sintiera “orgulloso de asociarse”, José Andrés no es el único en la lista. Después de sus declaraciones, al magnate le han dado la espalda canales como Univision, NBC o ESPN, o los almacenes Macy’s.
El asturiano tomó su decisión por las declaraciones de Trump contra los emigrantes hispanos