Otro buen dato de empleo despeja el camino a la Fed para subir tipos
Estados Unidos suma 215.000 puestos de trabajo y el paro se queda en el 5,3%
Antes de emprender su viaje de vacaciones a la isla de Martha’s Vineyard, en la costa de Massachusetts, a descansar y jugar al golf, el presidente Barack Obama se dio un minuto de gloria a costa de los datos de empleo registrados este pasado julio.
“Hemos creado otros 215.000 puestos de trabajo. Llevamos 65 meses consecutivos en el que sector privado crea trabajos. Son dos años extraordinarios como no hemos visto en los últimos quince y es un testamento del increíble ingenio y resistencia de la gente de Estados Unidos”.
Aunque el índice de paro no se ha movido del 5,3%, este incremento en el número de ocupaciones, ensalzado por el presidente, provocó de inmediato la certeza de que esta vez sí, de que la Reserva Federal (Fed) se decidirá en la reunión de septiembre a modificar la política monetaria, inamovible desde el 2008.
Si el índice de empelo se encuentra asentado a un nivel equivalente al anterior a la gran recesión, el precio del dinero cuenta con el viento a favor para introducir una modificación. Hace siete años que los tipos de interés se quedaron en cero o casi. La presidenta del banco central estadounidense, Janet Yellen, ha reconocido que esa variación se producirá en lo que resta de año.
Otros gobernadores de la Fed han asegurado que será en septiembre. Esta creencia lo avala el hecho de que la media mensual de creación de empleo se sitúa en 211.286 en lo que va del 2015.
“Es un crecimiento suficientemente sólido para mantener vivo el impulso en septiembre”, según la nota que envió a sus clientes Ian Shepherdson de Pantheon Macroeconomics.
La administración federal también revisó al alza –14.000 más– los puestos laborales creados en mayo y junio. En este julio se ha producido además un incremento de los salarios del 0,2%, menos de lo esperado pero mejor que en el mes precedente, cuando las nóminas no registraron incremento.
Durante los últimos doce meses, los sueldos han crecido una media del 2.1%. Esto significa que la subida no es mucho más que la tasa subyacente de la inflación, circunstancia que provoca la queja de los trabajadores por cuanto no palpan la mejora económica.
Y aunque las horas semanales trabajadas también suben, lo que se interpreta como una buena señal, existe todavía el nubarrón
La perspectiva se ensombrece por la escasa subida de los salarios y la caída de la población empleada
del número total de la fuerza laboral. La proporción de estadounidenses que forman parte de ese colectivo no aumenta, no se incrementa y ha caído en los meses anteriores. El nivel de la fuerza laboral es del 62.6%, algo no visto desde finales de la década de los años setenta.
Mientras que los empleos en el sector sanitario, del comercio, de los profesionales y de los negocios van al alza, el sector energético registra un retroceso. Cuenta con una pérdida de 4.000 trabajadores. Esta es la expresión del impacto que tiene el bajo precio del petróleo, que ha forzado a cerrar explotaciones de fracking.