El dulce envejecer de Sharon Stone
CON 57 AÑOS, LA ACTRIZ MANTIENE UN CUERPO QUE MUCHAS QUERRÍAN. DEFENSORA DEL SABER ENVEJECER, AFIRMA QUE EL SECRETO ESTÁ EN RODEARSE DE LA GENTE QUE QUIERES
Parece que envejecer está prohibido en Hollywood. Son muchas las actrices que intentan aparentar más jóvenes a base de pasar por un quirófano y hacerse todo tipo de retoques estéticos. Los papeles para mujeres de más de 50 años no abundan en el cine. Cuando el teléfono deja de sonar, se hace más complicado aceptar entre las estrellas de la gran pantalla que para ellas la edad también pasa.
Sharon Stone, la que durante décadas ha sido una de las actrices más atractivas y deseadas del mundo, se ha erigido como la defensora del envejecimiento. Aunque confiesa que no fue fácil para ella aceptarlo. Con cuarenta y pocos años un día se encerró en su cuarto de baño con una botella de vino. “Me dije que no salía de allí hasta que pudiera aceptar totalmente mi aspecto”, contó la actriz en la revista Shape. Confiesa que salió con la botella vacía después de haber llorado mucho hasta aceptar finalmente que estaba envejeciendo. Con está conclusión decidió ponerse en forma y vigilar aún más su dieta, así podía hacerse mayor mante- niendo un aspecto saludable y atractivo. Como budista, defiende que el mejor truco para mantener su belleza es estar rodeada de gente que le proporciona felicidad. A sus 57 años ha conseguido mantener un cuerpo que muchas ya les gustaría tener.
La actriz que encendió las pantallas de todo el mundo por el cruce de piernas que protagonizo en Instinto básico siempre se ha mostrado contraria a la cirugía estética y llegó a demandar a un cirujano que afirmaba que le había hecho un lifting. Son numerosas las declaraciones donde ha criticado a sus compañeras que utilizan demasiado este tipo de tratamientos. Aunque acepta que la gente recurra a estas operaciones, siempre que no abusen de ellas, asegura que ella nunca entraría en un quirófano para mejorar su aspecto físico. Y critica que lo hagan chicas jóvenes, ya que cada vez hay más gente que se parece entre sí y pierden su encanto natural, aquello que las hace diferentes al resto.
Ahora, Stone se ha convertido en la embajadora de una nueva campaña mundial, que pretende
Stone siempre se ha mostrado contraria a la cirugía estética, pero reconoce usar inyecciones de ácido hialurónico y ‘skinboosters’
demostrar los resultados obtenidos a través de los rellenos de ácido hialurónico y skinboosters. Unos tratamientos que la actriz ha probado en tiempo real y ha mostrado su efecto al gran público. Aunque muchos dudan que en las fotos de la campaña no se haya usado también Photoshop para rejuvenecer a la actriz aún más.
Esta última tecnología antienvejecimiento consiste en hacer infiltraciones de estos productos a través de agujas. No tiene nada que ver con los tratamientos de cirugía. Estos utilizan un método ambulatorio que evitan entrar en el quirófano y tener que utilizar la anestesia y el bisturí. Es lo que se llama medicina estética.
Con esta campaña quiere promover la confianza de estos tratamientos, después de los últimos escándalos que han protagonizado actrices como Uman Thurman o Renée Zellweger, a quienes se las ha criticado duramente por aparecer en actos públicos con el rostro facial completamente cambiado. La actriz, en una entrevista a
Paris Match, ha confirmado que desde que tuvo el aneurisma cerebral, en el año 2001, ha recurrido a este tipo de tratamientos. A consecuencia del derrame perdió el 18% de su peso corporal y su cara quedó muy desmejorada debido a su delgadez, sobretodo alrededor de la boca. Durante los siguientes dos años recurrió a las inyecciones de ácido hialurónico para rellenar los espacios vacíos y reparar su rostro. Stone afirma que este medicamento le sirvió tanto para curarse físicamente como psicológicamente.
En el momento que tuvo el aneurisma dejó de reconocerse en el espejo, gracias a las inyecciones volvió a sentirse ella misma. Y le dio fuerza para recuperase por completo y volver hacer su vida normal. A causa del accidente la actriz se quedó tartamuda y cojeando. Hasta tuvo que volver aprender a leer, una de sus mayores pasiones. Cabe recordar que la actriz tiene un coeficiente intelectual de 150 puntos, muy superior a la mayoría. Esta capacidad le permitió empezar los estudios universitarios de Literatura y Bellas Artes con tan sólo 15 años.
Después del aneurisma tuvo que luchar el doble para que los directores de cine volvieran a contar con ella. Pero todo esto y ha quedo atrás. La actriz ya está a pleno rendimiento ocupándose de sus tres hijos y a punto de estrenar serie en televisión. En los próximos meses dará vida a la vicepresidenta de Estados Unidos en la nueva serie de drama, llamada Agente X, que se podrá ver en EE.UU. a través del canal TNT. Stone se convertirá en la ficción en la primera mujer que ocupará ese cargo. Su personaje se verá involucrado en misiones de máxima seguridad, ayudada por un misterioso Agente X.