La Vanguardia (1ª edición)

El incendio de Gata continúa fuera de control y ya ha arrasado 6.500 hectáreas

Los bomberos desalojan a otras mil personas ante el avance de las llamas

- Agencias

El fuego continuaba ayer arrasando la Sierra de Gata (Cáceres). El fuerte viento dificultó las tareas de extinción, con rachas de hasta 69 kilómetros por hora, y las llamas avanzaban con virulencia. En total, el incendio ha quemado unas 6.500 hectáreas y ha obligado a desalojar de sus casas a 2.400 personas.

Durante la noche del viernes al sábado se vivieron momentos de gran tensión, pues el fuego rodeó la población de Hoyos y calcinó por completo algunas casas. “Cuando llegamos anoche, el fuego lo salpicaba todo. Y lo peor es el viento, si sopla de esta manera es muy peligroso atacar nada, lo único que pudimos hacer fue defenderno­s”, explicaba Antonio Lozano, miembro de la Unidad Militar de Emergencia­s que se ha desplazado hasta la zona. Algunos vecinos cuentan que tuvieron que salir de sus casas corriendo en plena madrugada, y que lo hicieron por iniciativa propia porque la orden de evacuación no llegaba. “Todo era un caos, la gente corría por la calle sin saber qué hacer, los animales andaban sueltos, hasta que llegó la Cruz Roja y recondujo el desalojo”, explicaban vecinos de esta localidad de mil habitantes. Los otros municipios que tuvieron que evacuarse son Acebo y Perales del Puerto, así como un camping cercano.

Los vecinos de estos dos últimos pueblos pasaron dos días alojados en las localidade­s de Moraleja y Coria, donde se prepararon locales y polideport­ivos para atenderlos. El Alcalde de Acebo, José Luis Perales, lamentaba que las llamas habían afectado casi la totalidad del municipio. Ayer por la tarde los habitantes de Acebo y Perales del Puerto pudieron regresar a sus casas, ya que las llamas ya no afectan a esos municipios concretos. De momento no se ha ordenado la evacuación de ninguna otra localidad, si bien en las últimas horas la dirección del viento amenazaba con acercar las llamas a otros pueblos.

La Sierra de Gata tiene un alto valor paisajísti­co y turístico y los servicios de emergencia­s creen que el fuego pudo ser intenciona­do. Aun así, todavía se desconocen las causas concretas del incendio. La vegetación de la zona está compuesta por robles, madroños, alcornoque­s, encinas, olivos castaños y pinares de repoblació­n. Estos últimos suponen una “bomba de gasolina” para el fuego, según recordaba ayer Ecologista­s en Acción, pues arden con mucha facilidad.

Durante la mañana de ayer llegaron a la zona nuevos efectivos del Ministerio de Medio Ambiente, que tiene ya 16 medios aéreos trabajando, así como de Badajoz, Andalucía, Castilla y León, Castilla-la Mancha y Portugal. La Cruz

Medios de Andalucía, Castilla y León, La Mancha y Portugal se suman a las labores de extinción del fuego

Roja también colabora atendiendo a los vecinos afectados. Según los datos facilitado­s por la Junta de Extremadur­a, en total trabajan 549 personas con medios aéreos y terrestres para extinguir el incendio, que continúa con Nivel 2 de peligrosid­ad.

Aparte de la Sierra de Gata, Villanueva de Oscos (Asturias) y Os Blancos (Ourense) también se enfrentan a un incendio. El Ministerio de Medio Ambiente envió medios aéreos y humanos hasta los fuegos declarados allí para tratar de controlarl­os. Por ahora las llamas han afectado una superficie mucho más reducida que la de la Sierra de Gata y las condicione­s meteorológ­icas son mejores.

El incendio forestal que se registró en el término municipal de Peranzanes (León) se dio ayer por extinguido. El fuego calcinó 48 hectáreas de bosque y otras 47 hectáreas de matorral. Aun así, en la provincia de León permanece activo otro incendio en la localidad de Viariz, que se declaró el sábado de madrugada.

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DAVID ARRANZ / AFP La Sierra de Gata tiene un alto valor ecológico que corre peligro por el efecto de las llamas

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