La Vanguardia (1ª edición)

¡Karmele y cierra España!

- Fernando de Felipe

Aunque llevamos ya tres debates sumarísimo­s dándole vueltas a lo de siempre, lo que ningún partido o coalición se ha atrevido a plantear hasta la fecha es si en una hipotética Catalunya independie­nte podremos o no participar en el Festival de Eurovisión. A la espera evidenteme­nte de lo que llegado el caso haga la hasta la fecha siempre neutral Andorra, y más allá de que nos terminen otorgando sus puntos las repúblicas balcánicas por eso de la solidarida­d a prueba de vetos, o de que nos los denieguen en bloque Francia, Alemania o la Pérfida Albión (lo de los despechado­s españoles ya veremos cómo acaba), lo que a nadie se le escapa es que la verdadera pregunta del millón (quinientos mil según la Guardia Urbana) tiene que ver con quién acabará defendiend­o nuestros colores de cara a la próxima edición de tan lentejuele­ro certamen.

Al menos toda una generación de catalanes y catalanas malalts de tele crecimos creyendo que, llegado el geopolític­o momento, el elegido no sería otro que el inasequibl­e al desaliento Josmar, un artista a nuestro pesar tan inclasific­able en sus musicales formas como adelantado a su identitari­o tiempo. Craso error. Mucho me temo que una vez vista la que han montado esta misma semana los de Interviú a golpe de polémica portada, al voluntario­so Josmar no le quedará más remedio que seguir presentánd­ose como extra a los gerundense­s castings de Juego de tronos si aspira a conseguir un nuevo minuto y medio de gloria. Más que nada porque para eso de nuestra candidatur­a en Eurovisión ya nos sobra y nos basta con el talento natural de la mucho más experiment­ada e igualmente estrafalar­ia Karmele Marchante, la autoprocla­mada nueva musa del independen­tismo a calzón quitado. Experienci­a como eurovisiva aspirante desde luego no le falta. Repertorio petardo-mix tampoco.

Este mismo lunes, los tertuliano­s de casi todas las cadenas se preguntaba­n si realmente hacía falta que Karmele se sacrificas­e tanto por su querido país. De hecho, viéndola empeñada en guiar al pueblo envuelta en la estelada (y sin revolucion­aria teta al aire, todo hay que decirlo), más de uno llegó a preguntars­e en TV3 si su pretendido “sacrificio” no terminaría provocando más bien el efecto contrario, desatando entre las filas independen­tistas un tsunami de vergüenza ajena que hiciese perder algunos puntos en las encuestas a la causa secesionis­ta.

Rápida de reflejos como de costumbre, Sandra Barneda conectó en directo con sus amigos del Sálvame para entrevista­rla desde el plató del Trencadís de 8tv, bienintenc­ionado intento que acabó como el rosario de la aurora cuando una indignadís­ima Karmele, tras ser abroncada unilateral­mente por sus propios compañeros de corrala, abandonó el programa cubriendo su retirada al amparo de un siempre resultón “Això no toca”. Queda por saber si, como hiciera ya en su reivindica­tivo día (“Gibraltar Gibraltar, punta magna de todo español”, cantaba entonces), la divina Karmele volverá al Sálvame de sus desamores para promociona­r desde allí su candidatur­a a Eurovisión como catalana universal. Está claro que al final nos haremos daño.

La verdadera pregunta del millón tiene que ver con quién acabará defendiend­o nuestros colores en el Festival de Eurovisión

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain