El G-20 respalda el plan de la OCDE contra la elusión fiscal de empresas
Los ministros del G-20 respaldaron ayer la adopción de las medidas para combatir la Erosión de la Base de Imposición y la Transferencia de Beneficios (BEPS en las siglas en inglés), que establecen una reforma de la normativa tributaria internacional.
De este modo, la propuesta acordada en la reunión de este colectivo en el marco de la asamblea anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) de Lima será enviada a los jefes de Estado de las 20 primeras economías mundiales para su ratificación en la cumbre de noviembre en Turquía, actual presidente del organismo.“La erosión de la base imponible y el traslado de beneficios están detrayendo de nuestras economías los recursos necesarios para reactivar el crecimiento, atajar los efectos de la crisis económica mundial y crear mejores oportunidades para todos”, declaró el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría.
El plan establece un nuevo enfoque internacional sobre la reforma de los impuestos de sociedades para alinear la fiscalidad con el lugar donde se produce la actividad económica real de una empresa y limitar aquellas prácticas de “fiscalidad agresiva”, que bordean la ley y que tienen como objetivo minimizar en los balances los beneficios.