Boko Haram causa 50 muertos en atentados en Chad y Camerún
Boko Haram ha perpetrado dos de sus mayores matanzas, en dos días y en dos países, Camerún y Chad, que llevan a cabo una larga campaña contra la organización yihadista nigeriana. En total son 50 los muertos y cerca de 80 los heridos en una cadena de atentados en riberas opuestas del lago Chad.
El sábado por la tarde se producía una explosión en el mercado semanal de pescado de Baga Sola –en territorio de Chad– y otras dos seguidamente en el barrio de Kousseri, donde miles de refugiados nigerianos y desplazados chadianos se han acogido, huyendo de los desmanes de Boko Haram. Baga Sola nunca había sido atacada antes. Cuarenta y una personas murieron y otras 48 resultaron heridas por varias explosiones.
Tras este ataque, ayer a las seis de la mañana Boko Haram lanzada un doble atentado, esta vez suicida, en territorio de Camerún. Dos mujeres hicieron detonar los explosivos que llevaban adosados a su cuerpo en la localidad de Kangaleri. La primera causó nueve muertos y 29 heridos en un pequeño restaurante, mientras que la segunda se inmoló en solitario. Boko Haram, que utiliza habitualmente chicas y niñas –que, en general, han sido secuestradas por la organización– para cometer atentados suicidas, ha perpetrado hasta el momento hasta quince ataques de este tipo en Camerún.
El mortífero ataque en Chad parece responder a estas mismas características, aunque las autoridades chadianas no lo han precisado. Según testigos, actuaron varios terroristas suicidas.
Los cuatro países ribereños del lago Chad –Camerún, Nigeria, Chad y Níger–, a los que se suma Benín, tratan de combatir a Boko Haram con una fuerza conjunta que tiene su cuartel general en la capital chadiana, Yamena. El lugar del atentado de ayer, Kangaleri, se encuentra a 30 kilómetros de Mora, base principal de uno de los sectores regionales de esa fuerza que tiene que acabar sumando unos 10.000 militares y policías. El pasado 20 de septiembre, otro doble atentado mató a tres personas en Mora, cruce de caminos entre Camerún, Chad y Nigeria.
A pesar del refuerzo de la seguridad y de los avisos de las autoridades a permanecer alerta, los yihadistas consiguen a menudo infiltrarse entre la población.