La Vanguardia (1ª edición)

Yo soy español (bueno, ¿y qué?)

- Joaquín Luna

Hoy, día de mi España querida, he recordado el entusiasmo con que llevaba a Arlington a todo fellow man de paso por Washington. Al primer descuido, le traducía la frase de John F. Kennedy frente a su tumba:

– No te preguntes qué puede hacer tu país por ti, pregúntate qué puedes hacer tú por tu país.

Hoy, 12 de octubre, me pregunto qué puedo hacer por España, aparte de pitar a Piqué.

Se me ocurre algo: no hacer nada. Al fin y al cabo, no hacer nada es un rasgo muy español. Cuidado, no estamos hablando de hacer el vago. No, aquí ganduleamo­s con conocimien­to de causa y mucha prosa: “salgo a hacer una gestión”, “estoy tomando un café (o dos)”, “me pillas en mal momento”, “en cuanto tenga un minuto libre, te digo algo”, “yo, por mi, lo que quieras pero la Constituci­ón dice...”.

Tampoco apetece salir a la calle y juntarse con nadie: ¿qué tipo de manifestac­ión patriótica íbamos a hacer una colla de gandules? “Yo entro un segundo a este bar, vosotros id pasando”, diría uno. “Anda, si aquí vive la cachonda de Mary, subo a saludarla, id pasando”. “Yo entro en este bingo, que hace siglos que no veía uno, id pasando”. Con gente así, la manifestac­ión sería un fiasco y media catalanida­d esbozaría la sonrisita Mas.

¿Y una ofrenda floral? Pero, ¿a quién? Porque una cosa es que yo ayer saludase a la virgen del Pilar –me venía de paso para ver torear a Morante– y otra es elegir a un español intachable y encima hacer cola para echarles flores. Elegir gusta poco en España: siempre acabamos a leches. Habría que buscar un patriota de consenso y ya me veo al gran Little Nicolás a hombros por la Meridiana, entre gritos de “¡queremos un hijo tuyo!”, proferidos desde los balcones.

Luego vendría el follón de fijar el plato más español para el almuerzo del 12. ¡La paella! La paella es para dos y no hay dos españoles que se pongan de acuerdo sobre cuál de sus respectiva­s madres cocinaba la mejor paella.

¡Y por la tarde de nuestra Diada, siesta! Vale, aquí hay consenso pero... ¿siesta con polvo o siesta en el sofá? ¿Con Tele 5 o el documental de La 2? ¿Y qué hacemos con el mus, la cuñada divorciada y el tío Leoncio, el de la mili en Sidi Ifni?

Yo lo dejaría en cuatro aviones reactores que surcaran las capitales de provincia a la hora del vermut y fueran soltando chorros con los colores de la bandera pero siempre saldría un listillo dispuesto a joder la marrana: ¡derroche con la de recortes que hay! Y tendría razón: fuera los aviones supersónic­os, con lo francés que quedaba.

Con este pueblo, no hay quien ensalce la patria. Un grito y a casa:

– ¡Yo soy español! ¿A qué quieres que te gane? – Bueno, ¿y qué? Eso respondía de joven Buñuel, mi español, cuando le contaban las proezas de sus amigotes Dalí o Lorca.

¿Qué tipo de mani por la patria íbamos a hacer una ‘colla’ de gandules? Sería un “vosotros id pasando”...

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain