“Si volviera a empezar, repetiría como médico”
Desde la crisis del ébola hasta los los brotes de legionela, Antoni Trilla es especialista en aplacar alarmas sanitarias y en tranquilizar a los ciudadanos aportando información científica rigurosa y comprensible. Este mes recuerda la conveniencia de que las personas que pertenecen a grupos de riesgo se vacunen contra la gripe
De no haber sido investigador, ¿qué le hubiera gustado ser? No cambiaría. Si volviera a empezar, repetiría como médico.
¿La cualidad que más aprecia en un científico? La capacidad de observación y análisis.
¿La que más le disgusta?
La vanidad y el egoísmo.
¿El rasgo principal de su carácter?
Capacidad de diálogo.
¿Qué piensa que es cierto aunque no pueda demostrarlo?
Que Dios debe de existir.
¿Qué idea desearía que se le hubiera ocurrido a usted?
Muchas, alguna de ellas buena.
¿Qué descubrimiento desea ver antes de morir? Una vacuna para las enfermedades neurodegenerativas y otra para el resfriado.
¿Qué necesita para concentrarse?
Muy poca cosa.
¿Qué actividad física práctica?
Perro (paseo) y golf.
¿La comida que más le gusta? La que hace Marta, mi mujer, que es médico y excelente cocinera.
¿Su ocupación preferida cuando no le ocupa la ciencia?
Dar clases en la facultad y hablar con ¿Cómomis alumnos. mantiene su cerebro en forma? Activamente: leyendo, escuchando, escribiendo…
¿Cómo le gusta relajarse? En realidad, no sé relajarme. Es un problema.
¿Su mayor error? Creer siempre que “todo el mundo es bueno”.
¿Quién merece un Nobel y no lo ha tenido? Mucha gente que ha hecho avanzar la medicina, a pequeños pasos, pero de forma brillante.
¿Un héroe de ficción? Sherlock Holmes y el doctor Watson, que son inseparables.
¿Un personaje histórico o actual a quien admire?
Nelson Mandela. ¿El maestro que más le ha marcado? Muchos, pero especialmente Joan Rodés.
¿Un consejo a un joven científico? Prepararse bien y tener amplitud de miras.
¿Lo que más le fascina? La solidaridad de las personas en momentos difíciles.
¿Una frase para colgar en la pared? “Elegimos ir a la Luna, no porque sea fácil, sino porque es difícil”. Es del discurso de John Kennedy en 1962 sobre la ciencia y la carrera espacial.
¿Su fórmula, número o molécula preferida? El anillo beta-lactámico (núcleo de la penicilina).
¿Lo último que le ha maravillado? Poder trabajar en lo que más me gusta, cada día.