La Vanguardia (1ª edición)

La fortaleza celeste

El equipo blanco visitará esta semana París y Vigo, donde le espera un rival en racha

- CARLOS NOVO Madrid

El Celta ya ha derrotado al Barça esta Liga y ahora se presenta como una seria amenaza para el Real Madrid, que visita el sábado Balaídos. Que el equipo vigués va muy en serio lo demuestra su victoria ante el Villarreal gracias a un gol de Nolito en el último minuto.

Doble amenaza para el Madrid. Primero el PSG el miércoles y después el Celta el sábado. El conjunto gallego va muy en serio. El equipo del Toto Berizzo salió triunfador del duelo de El Madrigal con un gol de Nolito en el último minuto que sacó del liderato al Villarreal, la otra gran revelación del campeonato. El Celta suma en la tabla los mismos puntos que el Madrid (18), nuevo líder por coeficient­e de goles, y el Barcelona. Precisamen­te, el cuadro gallego recibe en la próxima jornada en Balaídos al Madrid a la búsqueda de reeditar su victoria sobre el Barcelona (4-1) del 23 de septiembre.

El encuentro de El Madrigal no defraudó. Hubo un tiempo para ca- da equipo. En el primero el Villarreal, que tuvo una primera media hora muy buena, pudo sentenciar. Le faltó colmillo, una constante los últimos años pese a que en este ha cambiado a toda su delantera. El mérito del Celta fue saber resistir y golpear el primero a cuatro minutos del descanso por obra de Orellana, junto con Nolito su mejor futbolista. Aún hubo un tiro al poste del Celta antes del receso, del propio Nolito.

La segunda parte no pudo comenzar peor para el Villarreal, que sufrió la expulsión de Bailly por doble amarilla a los 47. Justo cuando el Villarreal parecía perdido y cuando el árbitro acababa de perdonar la roja a Augusto el conjunto de Marcelino se reenganchó con un remate de Denis Suárez que entró pegado al palo. Con veinte minutos por de- lante, y a pesar de estar con uno menos, el choque se convirtió en un duelo de ida y vuelta, con los dos equipos lanzados a por el gol de la victoria sin precaucion­es. No hubo muchas ocasiones porque las prisas muchas veces están reñidas con la precisión. Con todo, cualquiera pudo ganar. Cuando ya parecía inevitable el empate, apareció Orellana para eliminar rivales a base de amagos, acomodarse el balón y lanzar una rosca que se fue a la escuadra. Nolito, el más listo de la clase, cazó el rechace y mandó el balón a la red, todo en el último minuto.

Marcelino compareció en la sala de prensa compungido: “Estoy jodido; hemos regalado el partido. Si quieres estar arriba, hay cosas que no puedes conceder y en este partido hemos concedido muchas, ade- más de la expulsión que ha sido absurda”, señaló. Eduardo Berizzo valoró “el haber creído siempre en la victoria, demostramo­s que podemos vencer en cualquier campo”.

Para el Madrid, que triunfó sin demasiados problemas sobre el Levante el sábado, la semana es decisiva para poder medir el nivel del equipo, que no acaba de tener continuida­d ni de enamorar con su juego. Los blancos viajan el miércoles a París para jugarse el primer puesto de su grupo de Champions contra el PSG, que viene de ganar 0-2 al Bastia con dos goles de Ibrahimovi­c. La duda ahora mismo está en cuántos jugadores podrá recuperar Benítez de la enfermería. Ramos y Benzema tienen opciones, aunque sería arriesgar en ambos casos. Todavía es pronto para la reaparició­n de dos jugadores fundamenta­les, como Luka Modric y James. Pasada la prueba del Parque de los Príncipes el Madrid viaja el sábado a Balaídos, donde pondrá en juego el liderato en un escenario donde suele sufrir.

El Atlético, por su parte, salió airoso de Anoeta, donde una victoria clara se tornó en polémica en los minutos finales. Los del Cholo Simeone hicieron un gran ejercicio de fútbol control, de fútbol de pico y pala, tan del gusto de la casa.

La primera parte produjo lo mejor del choque. El equipo de Moyes salió con gran intensidad, pero el Atlético fue más eficaz. A los ocho minutos Griezmann dejó clavado en su arrancada a Illarramen­di, pasó como un cohete al lado de Diego Reyes y superó por alto a Rulli. No hubo muchos más remates entre los tres palos hasta los minutos finales, que fueron volcánicos. Reyes fue expulsado con segunda amarilla por protestar y en un arranque de furia la Real acorraló al Atlético. Ya en el añadido, Giménez derribó a Jonathas en el área. Iglesias Villanueva no vio penalti y en la contra Carrasco hizo el 0-2. Se armó una buena. Jonathas fue expulsado por protestar, entre un carrusel de amarillas para los donostiarr­as.

El exazulgran­a fue siempre un peligro y marcó el gol de la victoria celtiña en El Madrigal El Atlético marcó su segundo gol a la contra mientras la Real protestaba un penalti no pitado sobre Jonathas

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JOSE JORDAN / AFP Euforia entre los jugadores del Celta tras marcar Nolito el gol del triunfo

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