Albiol empieza a reconstruir la estructura del PP catalán
El líder popular quiere abrir el partido y fichar independientes
Xavier García Albiol ha decidido no esperar al congreso que el Partido Popular catalán tiene previsto celebrar en primavera o verano del 2016 y en el que, salvo sorpresa de última hora o debacle del PP el 20-D, el exalcalde de Badalona saldrá elegido como nuevo presidente del PP catalán, para reconstruir el armazón territorial del partido. Un estructura interna que, para su sorpresa, se ha encontrado desmontada y bajo mínimos.
Después de asumir el liderazgo electoral del partido en las pasadas autonómicas, en sustitución de Alicia Sánchez-Camacho y en un movimiento in extremis para tratar de dar la vuelta a las malas expectativas de los sondeos, Albiol está analizando el engranaje interno del PP en Catalunya, aquello que funciona y lo que él considera que debe cambiarse. En su primera toma de contacto, se ha encontrado con una estructura territorial muy débil y unas bases fieles con el proyecto del PP pero desmoralizadas por los casos de co- rrupción que asedian al partido en el resto de España. Unas bases que exhiben, además, un sentimiento de abandono por parte de la dirección y que se ven superadas por el auge de Ciutadans en sus municipios. “Sin una estructura territorial sólida y una militancia activa, estamos condenados al fracaso”, señalaron fuentes de la cúpula popular.
Ante esta situación, Albiol, cuya capacidad de movimientos está limitada por la paradoja de que Sánchez-Camacho siga siendo de facto la presidenta del partido, ha empezado a reunirse con las agrupaciones territoriales para conocer de primera mano la situación y tratar de reactivar el partido cuanto antes. Su primera reunión fue con el PP de Barcelona, donde el partido sufrió un severo castigo en las pasadas elecciones municipales –perdió casi la mitad de los vo- tos y pasó de nueve a tres ediles– y autonómicas, y el pasado sábado se reunió con los dirigentes de Girona, una de las provincias de toda España donde el PP se topa con mayores dificultades para penetrar y consolidarse. En las próximas semanas se verá con la militancia de Lleida y Tarragona.
En paralelo a esa reconstrucción del partido, que no podrá verse completada hasta que Albiol, por ahora líder parlamentario del PP catalán, asuma la presidencia y el control completo de la organiza- ción, el dirigente popular ha iniciado una serie de contactos con personas del mundo de la empresa, la universidad y el mundo de las asociaciones y entidades, con posiciones liberales y conservadoras cercanas al PP, para que de una forma u otra empiecen a colaborar con el partido. “Debemos salir de la trinchera y abrirnos a la sociedad”, señala Albiol, quien quiere aplicar en el partido la misma estrategia que llevó a cabo en Badalona y con la que pasó de ser el único concejal en el Consistorio a alcalde.