La Vanguardia (1ª edición)

La defensa del Barça no tiene quien la defienda

- CARLES RUIPÉREZ Barcelona

Con 11 tantos recibidos ya, hay que remontarse 24 Ligas para encontrar un Barcelona más goleado

Si el Barcelona no es primero aunque tiene los mismos puntos que el Madrid y el Celta es por culpa de los goles recibidos. Con 11 tantos encajados, el Barça, al que el curso pasado sólo le marcaron 21, ninguno hasta la novena jornada, no está ni siquiera entre las diez mejores

defensas de la Liga y es la zaga menos fiable de los grandes de Europa, con la excepción del Chelsea. De hecho, hay que remontarse 24 temporadas para encontrar un Barça más blando. Con Cruyff en la 1991-92, a estas alturas, llevaba 12 goles en contra. No acabó mal. Fue la primera Liga de Tenerife y la de la primera Copa de Europa, con un 1-0 en Wembley.

Irreconoci­ble, anda bastante cojo el Barça en su área y de ello se han aprovechad­o Atlético, Roma, Levante, Celta, Las Palmas, Bayer, Sevilla y el Rayo. Los porteros blaugrana llevan ocho partidos seguidos sacando el balón de la red y no dejan su meta a cero desde el 29 de agosto. La sangría no se frenó con el regreso de Claudio Bravo, que evitó males mayores el sábado. “Aguantamos el chaparrón”, definió el chileno.

Porque el Barcelona volvió a dar excesivas facilidade­s en la retaguardi­a y cedió 22 remates al Rayo. “Claramente tenemos que mejorar ese aspecto. No estamos a un nivel alto”, reconoció públicamen­te Luis Enrique. Es un problema que lastra a los blaugrana desde que les obligó a jugar una prórroga en Tiflis cuando tenían la Supercopa de Europa casi en el bolsillo y que les costó dejarse en Bilbao todas las opciones de la Supercopa de España.

Entre despistes y baja forma de algunos de sus miembros –Piqué arrastraba molestias musculares y Alves sólo tuvo un único entrenamie­nto después de 180 minutos con Brasil–, la defensa no tiene quien la defienda. “¿Sabes cuántos puntos tenemos?”, le repreguntó el técnico a un periodista que se preocupaba por la endeble zaga. Con la pólvora que tiene el Barcelona en la delantera, una defensa agujereada no siempre será un problema. No a corto plazo. Eso lo demostró Tito Vilanova, que aceptó en la 2012-13 (también 11 goles en 8 jornadas) intercambi­ar golpes sabedor que casi siempre

gana el equipo de más calidad y el Barça se proclamó campeón de Liga con 100 puntos. Hasta que se encontró con el Bayern en Europa.

En la Champions, los barcelonis­tas se jugarán el ser o no ser contra equipos muy equilibrad­os atrás. El mejor Madrid del siglo en ese apartado sólo ha recibido dos goles con un Keylor Navas magnífico. En el Atlético y el Bayern, Oblak y Neuer han sido batidos cuatro veces. Y en el PSG (5) no se ha notado el cambio de portero. Hasta el Arsenal y el City mejoran sus registros y eso que los equipos de Wenger y Pellegrini nunca fueron unos muros.

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