“Apostamos por proyectos arquitectónicamente estimulantes”
Labox es un despacho de arquitectura y diseño formado por un equipo de profesionales integrados en un proceso creativo pluridisciplinar. Su motivación principal es la búsqueda de soluciones novedosas y sensatas, que además ponen acento en el ahorro energético, proyectos enriquecedores para todas las partes implicadas. Resultado: trabajo con el que se disfruta. Y es que, para hacer las cosas como las harían los demás, ya están los demás…
¿Qué inquietud les llevó a crear Labox en Catalunya? ¿Qué concepto de despacho han perfilado buscando su diferenciación?
Teníamos la ilusión de crear un despacho propio, pero tan jóvenes era imposible en Reino Unido y, en Lleida vimos oportunidades. Cuando iniciamos este proyecto común, sabíamos que debíamos abrirnos camino a pesar de dos hándicaps: poner en marcha un negocio desde cero y en un entorno sin redes de contactos, por el hecho de ser extranjeros. Estas dificultades nos hicieron desarrollar una manera de trabajar que nos lleva a implicarnos al máximo en cada proyecto desde su raíz, incluso antes del diseño puramente arquitectónico.
La idiosincrasia de los catalanes, sus inquietudes y su búsqueda de la mejora continua ha encajado a la perfección con nuestra forma de ser, a nivel personal y profesional. Hoy sabemos que si en 1994 hubiéramos iniciado Labox en el Reino Unido en lugar de en Catalunya, seríamos hoy mucho más conservadores y menos útiles a nuestros clientes.
Tienen despachos en Catalunya y el Reino Unido ¿Al final, trabajan exportando e importando distintos modos de hacer y de entender la arquitectura y el diseño?
Sí. Ambos despachos trabajan simultáneamente en todos los proyectos, aportando a nuestros clientes ideas de profesionales de diversas culturas y conocimientos, con una metodología común muy enriquecedora. Nuestros clientes en España se benefician del proceso pluridisciplinar que ofrecemos, mientras que los clientes en el Reino Unido buscan una metodología más liberada y completa, en contra de los esquemas conservadores allí establecidos. Por ejemplo, nuestro despacho cercano a Londres está atrayendo a muchos promotores de viviendas, a los que les encanta el frescor de un proceso desarrollado aquí.
¿La innovación es un pilar fundamental en su trabajo?
Absolutamente. Labox ha sido capaz de encontrar vías alternativas, poco habituales, para llevar a cabo proyectos que inicialmente no eran viables para promotores (tanto privados, como públicos), aportando ideas innovadoras respaldadas con la documentación apropiada, llegando incluso a conseguir financiación de la UE para garantizar su arranque. Creemos y apostamos por el desarrollo de nuevas propuestas que se puedan traducir en proyectos eficientes energéticamente y arquitectónicamente estimulantes.
¿En qué tipo de proyectos se han especializado?
Ambos somos arquitectos formados en el ámbito de edificación y espacios de uso público. Bajo nuestro punto de vista los edificios (públicos y privados) comparten el mismo espacio público para relacionarse los unos con los otros, por lo que consideramos que los componentes que intervienen en sus diseños deben ser similares. La análisis del entorno físico y la eficiencia energética forman los pilares técnicos del proceso.
Por otra parte, Labox, como “partner”, busca valores añadidos en cada proyecto y nos ha llevado a terrenos no habituales para arquitectos. Actualmente estamos participando en el desarrollo de patentes de mecanismos de ahorro energético, diseño de muebles, imagen corporativa y planes de viabilidad de nuevos negocios en su territorio.
¿Dónde empieza y dónde termina la implicación de Labox en cada proyecto?
Gracias a nuestro equipo pluridisciplinar e internacional nos unimos a la ilusión del cliente desde el desarrollo del concepto, ayudándole en la creación y difusión de la imagen, actuando como interlocutor con la administración local e internacional, estudiando la economía del conjunto y, por supuesto, trabajando en los componentes puramente arquitectónicos. Nuestro punto de vista fresco y libre ha demostrado ser muy útil para participar en una gran variedad de tipologías de proyectos que no son exclusivamente constructivos.
A quienes creen que exportar servicios profesionales está reservado solo a los grandes, les decimos “depende!”