Rivera propone a los catalanes ser el motor del “cambio en España”
C’s denuncia un acuerdo entre PP y PSOE para salvar al “soldado Sánchez”
En su primer acto de campaña en Catalunya, Albert Rivera reivindicó la catalanidad del proyecto político de Ciudadanos y pidió un apoyo masivo en las urnas para que de esta forma los catalanes se conviertan a partir del 20-D en el “motor del cambio y la regeneración” de España, rechazando propuestas rupturistas e inmovilistas.
Durante unos segundos, en un mitin que reunió a 600 personas en el Palacio de Congresos de Tarragona (por la tarde, reunió a 1.500 personas en Zaragoza) , Rivera echó la mirada atrás y recordó que C’s fue fundado en 2005 como una “plataforma civil” para combatir el nacionalismo y consideró que ahora, diez años después, una victoria naranja en Catalunya el 20-D tendría mucho de “sueño cumplido”. Sería el mejor antídoto, dijo, frente “a los independentistas” y frente a aquellos que más allá del Ebro “no entiendrid den la diversidad de España”.
El candidato de C’s se postuló, pues, como la “mejor garantía de que los españoles podamos seguir viviendo juntos” ya que “a diferencia de PP y PSOE” C’s tiene un “proyecto común” para todos los españoles, con el mismo discurso en Barcelona, Madrid, Valencia o cualquier punto del país. Por ello se comprometió a si es el futuro inquilino de la Moncloa poner fin “a las guerras de bandos” y a que las Autonomías y el Estado “colaboren y trabajen juntos”.
Crítico se mostró con Artur Mas por haber dividido la sociedad catalana para tapar los casos de “corrupción” que afectan a su partido, como también lo fue con Mariano Rajoy por pensar que sólo con “aplicar la ley” basta para solucionar la cuestión catalana.
En Tarragona, uno de las provincias en las que C’s puede cosechar más votos el 20-D, Rivera también marcó distancias con el líder del PSOE, Pedro Sánchez, al que reprochó que tenga un lenguaje distinto en Catalunya y Ma- y que el PSC pacte con partidos nacionalistas.
Sobre Pablo Iglesias, ayer presente en l’Hospitalet de Llobregat, dijo que no tiene ni idea de lo que sucede realmente en Catalunya con el órdago independentista y le advirtió de que con su defensa del referéndum está “cayendo en la trampa” de Mas.
La idea de que Catalunya pueda ser decisiva el 20-D para frenar el independentismo fue el eje también de la intervención del candidato por Barcelona, Juan Carlos Girauta, quien se mostró orgulloso de que tanto los separatistas como el PP vean en C’s su principal adversario. “Artur Mas avisó ayer de que si CDC no ganaba el 20-D en Catalunya lo haría C’s, y yo tengo que decir que por
El líder de C’s cree que su proyecto causa nerviosismo entre los independentistas y también en el PP
primera vez en mi vida estoy de acuerdo con él: ¡vamos a ganar las elecciones!”, proclamó Girauta.
Puestos a mirar atrás, a rememorar eso primeros años en los que apenas reunían en sus actos un puñado de personas, Rivera recordó que desde los partidos políticos e importantes tribunas mediáticas les decían y les repetían que era “imposible” que un nuevo partido encontrara su espacio en la arena política. Un mensaje para evitar el nacimiento de C’s que tenía su origen en el pacto del los nacionalistas con PP y PSOE para tapar como hacen “las bandas” sus respectivos casos de corrupción y que todo siguiera igual.
Un intento de perpetuar el statu quo que, alertó Rivera, vuelve a reeditarse con la campaña que ha puesto en marcha el establishment –“tienen miedo a nuestro proyecto de cambio”– para salvar in extremis al bipartidismo y al “soldado Sánchez” el 20-D. “PP y PSOE, los dos viejos partidos, aunque hagan ver que se pelean están de acuerdo en conservar sus privilegios”, concluyó.