Mernissi y el Proceso de Barcelona
El 30 de noviembre nos ha dejado Fatima Mernissi; ese mismo día de 1995 se encontraba en Barcelona. La escritora y socióloga marroquí había sido invitada al acto inaugural del Fòrum Civil Euromed junto a Giovanni Agnelli, el entonces príncipe Felipe de España y toda la panoplia gubernamental europea junto a 1.200 participantes. El Fòrum Civil se oficiaba tras la primera Conferencia Ministerial Euromediterránea, fecha que actualmente se ha conmemorado con menor entusiasmo que veinte años atrás: el Mediterráneo hierve en guerras, exilios y muertes.
El Proceso de Barcelona tenía como objetivo lograr la paz y desarrollo compartidos en la zona Euromed, a través de medios financieros y políticos. Lo más novedoso de la declaración de la conferencia fue que, por primera vez, se valoraba la sociedad civil como factor clave para el desarrollo y democratización de los países del sur. Por eso la CE y el Ministerio de Exteriores español encargaron al Institut Català de la Mediterrània, actual IEMed, la selección de participantes y la organización del Fòrum Civil Euromed. Queríamos dar protagonismo a la sociedad civil y Fatima Mernissi, intelectual con importantes publicaciones en su haber como El harén político: el profeta y las mujeres o Sultanas olvidadas, comunicadora comprometida, era una excelente representante. El discurso que ofreció fue premonitorio: ¿Por qué los árabes emigran a Europa?
Mernissi emprendió una producción sociológico-literaria implicando a universitarios, periodistas y representantes del asociacionismo marroquí, siempre dando voz a esas Sherezades que no temían hablar, impulsando con su figura a la sociedad civil en la que creía firmemente. Mi última visita a la escritora fue a finales de mayo en su domicilio de Rabat. Entusiasmada como siempre me mostró la publicación coral que acababa de aparecer en Marruecos, Réflexions sur la ‘Violance’ des jeunes, violencia atizada por las redes informáticas tanto por el consumismo como por la captación mortífera. Tecnologías que ella había sido pionera en manifestar el éxito que estaban obteniendo en el mundo árabe. Ahora se interesaba en recuperar las visiones sufíes de los clásicos musulmanes de interés universal que contraatacaran la simpleza del fanatismo. La muerte de Fatima Mernissi, acontecida en un aniversario con grandes retos en la zona euromediterránea, representa una gran pérdida cuando necesitamos más reflexiones contrastadas.