Blindaje de seguridad y floja afluencia de turistas ante el inicio del jubileo
El jubileo extraordinario de la misericordia comenzará mañana con una solemne ceremonia presidida por el papa Francisco, quien abrirá la puerta santa de la basílica de San Pedro. Roma acoge este año santo muy blindada, con miles de policías y soldados movilizados para evitar un atentado terrorista o reaccionar lo antes posible si se produce cualquier emergencia.
El clima de inseguridad en Europa después de los ataques de París puede haber disuadido a peregrinos y turistas de dirigirse a Roma en estos momentos. El gremio de hoteleros de la capital reconoce que ha habido muchas cancelaciones. Hay gran cantidad de habitaciones libres en este puente de la Inmaculada. Se calcula que la afluencia ha sido un 20% inferior que el año pasado en los hoteles y hasta un 50% más baja en los bed & breakfast, todo ello pese al jubileo.
En Roma hay desplegados 2.250 soldados, con armas automáticas en la mano, protegiendo edificios estratégicos y también entradas de metro y accesos a estaciones de tren. Se ha decretado una zona de exclusión aérea sobre la capital. Está prohibido el transporte de combustible, gas y otras sustancias inflamables. Tampoco están permitidos ni los petardos ni los fuegos artificiales. La prefectura ha bloqueado 300 camas libres en hospitales, por si acaso. Con todo, el sistema tiene sus lagunas. La prensa ha denunciado, por ejemplo, que existen en Roma 30.000 alojamientos no declarados –bed and breakfast o apartamentos ilegales–, lo cual supone un grave peligro, pues los usuarios no quedan registrados.
La tradición del jubileo se remonta al pueblo judío. Está citada en el Levítico, en el Antiguo Testamento. El cristianismo la adoptó en 1300, con el papa Bonifacio VIII. Los jubileos ordinarios se celebran cada 25 años. Pero los papas pueden convocar años santos extraordinarios, como sucedió en 1933, cuando Pío XI quiso celebrar los 19 siglos desde la crucifixión de Jesús, y en 1983, con motivo de los 1950 años del mismo acontecimiento. Francisco ha visto la necesidad de un jubileo de la misericordia como expresión del mensaje central del Evangelio y también porque se trata de un valor compartido con las otras religiones, sobre todo el judaísmo y el islam.
La ceremonia de mañana en la plaza de San Pedro se iniciará a las 9:30 horas. Los peregrinos que quieran atravesar la puerta santa durante el año jubilar deben registrarse en el centro de acogida, en la vía della Conciliazione, número 7, o bien por internet, en el sitio www.im.va. Francisco quiere que este jubileo sea descentralizado y una fiesta en todas las diócesis del mundo. Se abrirán las puertas santas de todas las catedrales, desde Estambul, en Turquía, a Seúl, en Corea del Sur, desde Beirut, en Líbano, a Ratnapura, en Sri Lanka.