DelicARTessen 14 reúne más de trescientas obras de ochenta artistas
La actual edición incorpora nuevos dibujantes y pintores figurativos
DelicARTessen 14 reúne en la galería Esther Montoriol más de trescientas obras en pequeño formato –pinturas, esculturas, dibujos y fotografías– de ochenta artistas de distintos países y generaciones, en su mayoría residentes en Catalunya. Son más artistas y más obras que nunca, pero la selección mantiene el buen nivel de las anteriores ediciones y además este año hay nuevas incorporaciones que ofrecen buenas sorpresas. Entre estas destacan las contribuciones de algunos pintores figurativos clara o sutilmente heterodoxos.
El sevillano Jabi Machado expone pinturas extrañas y sugestivas, como Templo hombre, donde se combinan elementos sagrados y profanos. Es una escena misteriosa que incluye gestos de humo, cifras flotantes y un posible laberinto orgánico trazado o tatuado en una espalda. También de Machado es
Gran hombre biológico, cuadro que funciona gracias al certero color y la rara escala de la casa que aparece junto a un hombre desnudo.
Otra excelente sorpresa son las pinturas y dibujos del francés Jacques Flechemuller, que cabe relacionar con las obras libérrimas de dibujantes como Bob Zoell y Gary Panter, poco difundidos en nuestro país, aunque participaron en el Homenaje a Hergé que se celebró en 1984 en la Fundació Joan Miró, que comisariamos el diseñador gráfico Peret y yo. Aprecio en Flechemuller su desparpajo sin autocensuras estéticas, su mucha frescura y el personal y salvaje sentido del humor con que expresa y representa algunos aspectos y situaciones de la especie humana.
También es un buen ejemplo de figuración felizmente renovada la pintura de Xevi Solà, que participa con extraños retratos como Dark
Purple o Vincent, titulado así porque su protagonista es un marine estadounidense llamado Van Gogh. Philippe Weisbecker expone dibujos de ovnis domésticos, en forma de enchufe y estufa. Y la italiana Moira Franco es otra novedad interesante en esta línea figurativa, que también representa un habitual de esta muestra como es Marcos Palazzi, este año con pinturas sobre jugadores de billar.
Al visitar DelicARTessen 14 conviene tener a mano las hojas de sala para identificar títulos y autores. Bastantes obras mejoran con el título, que sirve de complemento, contrapunto, vuelta de tuerca o desvío conceptual. Así sucede en Origen del deseo. Quiero tomar una cerveza,
de la japonesa Mari Ito, en Apogeo
de la Era Mecánica, una masacre dibujada por Fum, y en otras como Cerdo español, de Jabi Machado,
Cabeza de Chorlito y Pico de Oro ,de Manuel de Val, Máscara de oso ,de Miquel Aparici, Eu bebo sim, de Flavio Morais (uno que bebe sin cabeza), o Días enteros perdidos por las ramas, donde Manel Rubiales parafrasea un título de Marguerite Duras.
Entre los artistas que trabajan las poéticas del reciclaje material y conceptual encontramos a Cesc Riera (Aparato), Manel Rubiales (5/
Hand, Wunderkammer n. 5), Flavio Morais (camiones, atracciones de feria, o un tocadiscos llamado Baby
boom), Jordi W. Saladrigas (los libros-paisaje de la serie The Silence) y Miquel Aparici (un bestiario). O también a Manuel de Val (Mona Lisa: versos, reversos).
También notables las Mantas de Sabine Finkenauer, las piedras con sombras fotográficas de la iraní Mariam Shambayati, las obras de Lusesita, Núria Armengol... La lista sería larga. Y mención aparte merecen las intuiciones de Plácido Romero, anteriores a los asesinatos yihadistas de París, en obras con calaveras
. como Noche infesta y La vie en rose. Galería Esther Montoriol. Diputació, 339. Hasta final de enero.
Frank Plant. El artista estadounidense Frank Plant presenta sus últimos dibujos realizados en acero pintado. Destaca la gran escena multitudinaria y playera Oh the Humanity..., de cuatro metros de ancho, el gran retrato de una mosca enmascarada cromáticamente Atomic Fly y la urna pseudogriega con dibujos de neonarcisos que se hacen selfies. Víctor Lope Arte Contemporáneo. Aribau, 75. Hasta el 15 de diciembre.