La estrella negra de unos Oscar polémicos
EL CÓMICO DE COLOR CHRIS ROCK SERÁ EL ENCARGADO DE PRESENTAR LA NUEVA GALA DE LOS OSCAR, MARCADA POR LAS ACUSACIONES DE DISCRIMINACIÓN RACIAL CONTRA LA ACADEMIA. ROCK YA CONDUJO LA CEREMONIA EN EL 2005
La de este año no será una gala más de los Oscar. La 88.ª edición de los premios de la Academia de Hollywood, que se celebrará en la madrugada de este lunes, puede marcar un antes y un después de la célebre alfombra roja del teatro Dolby de Los Ángeles, ya que actores de la talla de Will Smith y su mujer Jada Pinkett, el director Spike Lee y algunas otras figuras de la comunidad negra del cine norteamericano han anunciado que boicotearán la ceremonia no acudiendo a ella para reivindicar así la presencia de actores negros en los premios. Y es que, por segundo año consecutivo, no hay ni un sólo afroamericano entre los 20 candidatos a las cuatro categorías de interpretación.
El que sí estará, y es negro, es Chris Rock, que será el presentador de la gala por segunda vez. En la primera, en 2005, no obtuvo un especial éxito. Su estilo de humor no convenció ni a los críticos tele- visivos ni a algunos de sus colegas intérpretes que le recriminaron algunos de sus chistes.
Comediante, actor, guionista, productor y director de cine. Christopher Julius Rock III ha aprendido todas estas facetas en su vida profesional, que ha tenido muchos principios. El primero fue en 1985 como cómico en Nueva York. Gracias a eso, se hizo amigo de Eddie Murphy, su mentor, que le dio su primer papel en
Superdetective en Hollywood II. Cinco años después, Rock entró en el equipo de cómicos de la serie Saturday night live (SNL). Formó parte de los Chicos Malos de SNL junto a David Spade, Adam Sandler y Chris Farley. Pero eso acabó pronto, porque Chris, frustrado por aparecer sólo en su papel de Nat X, dejó el show en 1993 y se unió a la serie In living color, que fue un fracaso.
El segundo principio fue en su carrera cinematográfica con CB4, que escribió y protagonizó él mismo. La película fue número uno en Estados Unidos, pero en el res- to de países tuvo muy poca distribución. Después de eso sólo ha vuelto a trabajar de manera puntual en el cine, centrándose sobre todo en sus shows como cómico.
Bring the pain, show de 1996, convirtió a Rock en uno de los mejores comediantes de la industria. El programa incluía comentarios racistas por parte del actor, que provocaron controversia, pero eso no impidió que ganara dos premios Emmy. También hizo de comentarista en el programa de Comedy Central para las elecciones presidenciales de Estados Unidos en 1996 Politically inco
rrect. Y de nuevo volvió a ganar un Emmy por su talk show The
Chris Rock Show, aclamado especialmente por las entrevistas que hacía a personajes famosos. En total, su carrera en la televisión le ha reportado tres Emmy y quince nominaciones, una buena cosecha.
Aunque en su paso por el cine no ha cosechado el mismo éxito, Rock no ha perdido el tiempo y también ha escrito libros, ha grabado un disco y hasta ha filmado vídeos musicales de canciones propias.
Rock tiene un estilo cómico que precisamente se centra mucho en las referencias al racismo y
las diferencias sociales en Estados Unidos, influido por su infancia como negro en un colegio público de blancos. Y con este humor llega a una alfombra roja salpicada este año más que nunca por las acusaciones de la discriminación racial en la industria del cine americano.
El cantante, actor y compositor Tyrese Gibson y el famoso rapero 50 Cent pidieron a Rock que re- nunciara a presentar los premios, pero él ha seguido adelante. Al respecto parece decisivo lo que ha manifestado el productor de la ceremonia, Reginald Hudlin: “Rock y su equipo de guionistas han decidido rehacer el guión que tenían montado antes del problema del boicot. Han escrito un nuevo show”.
El humor de Chris, corrosivo y ácido, se ha considerado difícil entre los miembros de la Academia. No es de extrañar dada la elevada edad media del colectivo. De hecho, tras el boicot y después de una votación unánime, se ha decidido aumentar la representación de mujeres y minorías en una academia que tiene un 93% de miembros blancos, y de ellos el 76% son hombres y con una edad media de 63 años. Y la presidenta, Cheryl Boone Isaacs, ha anunciado que habrá más cambios para tratar de minimizar las discriminaciones.
Parece claro pues que algo se está moviendo en Hollywood y que esta gala puede ser clave, puede ser el comienzo de una nueva etapa de los premios. Y puede ser decisivo el protagonismo de Rock, un negro dentro de una gala boicoteada por las sospechas de discriminación racial.
Es amigo de Eddie Murphy, que le dio su primer papel en ‘Superdetective en Hollywood II’ Su humor está precisamente muy centrado en el racismo y las diferencias sociales en Estados Unidos