Ríos con vida. La región de Barcelona, vulnerable a una gran sequía
El plan de gestión del agua cifra el déficit en 60 hm3 al año, la producción de una desalinizadora
La región central de Catalunya, servida con recursos de los ríos Ter y Llobregat, no tiene garantizada completamente el suministro de agua en el caso de una prolongada sequía. Su déficit de caudal, en caso de un largo periodo de escasez, ha sido cifrado en 60 hm3 anuales, el equivalente a la potencial producción de agua de una desalinizadora como la El Plat. Así lo recoge el plan de gestión del distrito de la cuenca fluvial de Catalunya 2015-2021, que está a punto de aprobar el Gobierno catalán. El documento no da una solución a este déficit estructural, no dice qué actuaciones serían necesarias para saldarlo y deja que sea el Plan Hidrológico Nacional (de competencia estatal) el que ofrezca las medidas que habría que adoptar. El plan destaca que el 59% de las masas de agua de los ríos catalanes están en mal estado.
El déficit de 60 hm3 es el escena- rio que podría darse si se produjera una sequía incluso peor que la registrada el 2007-2008, pues en esta estimación se ha considerado incluso un tercer año seco, según fuentes de la Agència Catalana de l’Aigua (ACA), que ha elaborado el plan.
Para afrontar una sequía, la respuesta de la Administración sería la aplicación de un plan de restricciones progresivas para los distintos usos que irían incrementándose en función de las diferentes fases (prealerta, alerta, excepcionalidad y emergencia). Ahora, la región de Barcelona y Girona/ Costa Brava (servida por el Ter y el Llobregat) tiene una demanda de 483 hm3 al año, y precisaría, pues, un refuerzo de 60 hm3 para garantizarla y no sufrir las consecuencias de una sequía de tres años seguidos. Tales déficits serán comunicados a la Administración central, como exige la legislación sobre planificación hidrológica, dice el mismo documento.
Para mejorar la garantía de agua, los autores del plan sostienen que la región de Barcelona debería ser objeto de actuaciones de interés general susceptibles incluso de recibir fondos de los presupuestos estatales (o comunitarios, llegado el caso). No obstante, las inversiones estatales en materia de infraestructuras hidráulicas “han sido prácticamente nulas en los últimos cuatro años”, señalan los técnicos de la ACA.
Jordi Agustí, director de la Agència Catalana de l’Aigua (ACA), destaca que los recursos hídricos existentes evidencian una mejora de la situación con re-
APUNTO DE APROBAR SE La ACA comunicará la situación de riesgo a la Administración central para que la solucione
NOA MÁS DES ALI NI Z ADORAS Para mejorar la garantía, el plan reclama una respuesta estatal
lación al panorama que condujo a la gran sequía del 2007-2008. No se prevé un aumento de la demanda de agua, por lo que “no se necesitan grandes infraestructuras”, sentencia Agustí.
La disponibilidad de agua mejoró gracias a la construcción de la desalinizadora de El Prat en el año 2009 (60 hm3), la ampliación de la desalizadora del Tordera (hasta 20 hm3), las interconexiones de redes y la recuperación de decenas de pozos modernizados para aprovechar reservas subterráneas, tras la sequía del 2008. Se ha renunciado a la construcción de la desalinizadora de Cunit y a una segunda en el Tordera, prevista en el anterior documento (año 2009).
El plan de gestión del agua tiene como finalidad aplicar la directiva europea marco de agua para que ríos, lagunas, humedades y demás reservas de agua subterráneas recuperen su buen estado ecológico. Sin embargo, la radiografía que se ofrece no es nada favorable. El 59% de las masas de agua de los ríos está en mal estado y únicamente el 35% presenta una buena situación (del resto sólo hay datos parciales). La situación es, incluso, peor en el caso de las aguas subterráneas (un 65% está en mal estado y un 35% en buena situación). Por esa razón, se asume que el cumplimiento de la directiva del agua exige esfuerzos considerables adicionales para aplicar medidas correctoras. En muchas zonas de Europa entre el 50% y el 70% de sus masas de agua se encuentran en mal estado.