TYLER COWEN SE ACABÓ LA CLASE MEDIA
¿Se acaba la clase media, la base de la democracia y las sociedades de consumo del siglo XX? ¿La globalización, las tecnologías digitales y la ideología llevan a un mundo como el de las series británicas de amos y criados pero con ordenadores inteligentes por todas partes? Para el catedrático de Economía Tyler Cowen, autor de Se acabó
la clase media, sí. Habrá una brecha cada vez mayor. La productividad creciente de las máquinas inteligentes crea fuertes desequilibrios entre sectores –hoy un iPhone es más potente que cualquier ordenador de 1985, pero los aviones siguen igual– y hacen que si tus conocimientos complementan al ordenador, tus perspectivas salariales sean buenas; si no, mejor corregir el desfase. Los beneficios de las máquinas inteligentes van a lo que escasea: a los propietarios de recursos, a gigantes como Apple y a trabajadores talentosos. Y a los ejecutivos que los contratan. Los equipos hombre-máquina revolucionarán la economía, la medicina y la ciencia. Las empresas podrán evaluar el rendimiento económico de cada trabajador con precisión agobiante: habrá hipermeritocracia. Y un gran crecimiento del empleo en los servicios personales: criados, chóferes, jardineros. Y gente que ofrezca experiencias a los ricos, que serán entre el 10% y el 15% de la ciudadanía. Gran parte del resto tendrá salarios estancados o menguantes, aunque con más oportunidades de diversión y educación baratas.