Interceptados dos cazabombarderos rusos en el canal de la Mancha
Los radares militares de Francia y el Reino Unido detectaron el pasado 17 de febrero la presencia de aviones de guerra rusos volando sobre el canal de la Mancha. Según difundió ayer la prensa francesa, eran del tipo Tupolev Tu160, que es un bombardero pesado supersónico capaz de transportar misiles con carga atómica. La na- ves rusas volaban sobre aguas internacionales y, según el comandante en jefe de la fuerza aérea de Francia, se dieron la vuelta antes de entrar en su espacio aéreo.
“Los bombarderos salieron de Rusia, contornearon Noruega, las islas británicas, donde se encontraron con dos cazas británicos”, clase Typhoon. “Nosotros los detectamos en el canal de la Mancha”, resumió el general André Lanata en un encuentro con la asociación de periodistas de defensa, este lunes. Francia envió dos cazas, un Rafale y un Mirage 2000, que junto a los británicos escoltaron a los rusos “hasta que subieron hacia el norte”. Según los medios galos, los Tu-160 se acercaron a unas decenas de kilómetros del municipio de Le Touquet.
Rusia no ha hecho comentarios sobre este incidente, aunque los responsables de seguridad han afirmado en repetidas ocasiones que los vuelos rutinarios de la aviación rusa respetan las regulaciones internacionales sobre el uso del espacio aéreo sobre aguas neutrales y que por lo tanto no violan las fronteras o el espacio aéreo de ningún país.
Los vuelos de aviones rusos cerca del espacio aéreo de los países miembros de la OTAN y la interceptación por parte de cazas de la Alianza se han multiplicado en los últimos dos años, dentro del contexto del conflicto de Ucrania, que ha aumentado la tensión entre Moscú y los gobiernos occidentales hasta el punto de hablar de nueva guerra fría.
“Si no se elaboran mecanismos para evitar crisis adicionales, las cada vez más enérgicas actividades rusas, junto con las medidas de seguridad adoptadas por la OTAN como respuesta, incrementarán los riesgos a la estabilidad en Europa”, ha dicho esta semana el think- tank European Leadership Network en un informe en el que defiende la necesidad de un memorando de entendimiento entre la OTAN y Rusia en esta materia. Los autores, Ian Kearns y Denitsa Raynova, ponen como ejemplo el derribo de un caza ruso por un avión turco en la frontera entre Turquía y Siria, en noviembre del 2015, “con ramificaciones diplomáticas y económicas más extensas”.