El fiscal excluye a los Maristas de la acusación a Benítez
La fiscalía ha notificado a las partes que se muestra contraria a que los Maristas formen parte de la acusación particular en el proceso judicial abierto contra su exprofesor de gimnasia Joaquín Benítez, que confesó haber abusado sexualmente de varios alumnos. En otras palabras, la fiscalía, igual que sostiene la defensa de las víctimas, cree que los Maristas tuvieron algún tipo de implicación en el caso, al menos porque los abusos los cometió un empleado suyo bajo su techo. Es decir, no se puede ser acusador y acusado en el mismo procedimiento.
El juez tendrá la última palabra pero todo apunta a que, tras la notificación del fiscal, los Maristas quedarán fuera de la acusación y tendrán que responder de los abusos de su profesor como responsable civil subsidiario, indemnizando a las víctimas que puedan probar las agresiones que no hayan prescrito.
La Fundación Champagnat, que es propietaria de las escuelas maristas, presentó un escrito ante el juez para personarse como acusación particular en el proceso contra el profesor acusado. Alegó que los abusos sexuales cometidos por su docente han afectado a su imagen y le han conllevado “un menoscabo de su fama y excelencia en la enseñanza impartida”. El fiscal responde que el argumento “se escapa de toda lógica puesto que no entiende “de qué manera ha podido ser perjudicada la congregación de los Maristas ya que las denuncias hacen referencia a “delitos cometidos por un profesor del colegio y siendo víctimas diversos alumnos”. Por ello les conmina a presentar una demanda por la vía civil contra el docente para reclamarle los posibles daños y prejuicios.
Manuel B., el padre que destapó el caso, mandó ayer una carta al Papa para que exprese su condena pública, pida perdón y abra una comisión de investigación sobre la secuencia de abusos ahora en los tribunales.