Holocausto animal
Detenidos los responsables de una protectora de Marbella por maltrato
De puertas hacia afuera funcionaba como una protectora de animales, pero la realidad se asemejaba más a un campo de concentración nazi para perros y gatos. Ya el nombre de la asociación, Triple A, recuerda a la siniestra organización de extrema derecha argentina que tanta influencia tuvo en los años de la represión. La Guardia Civil ha detenido a cuatro responsables e investiga a 17 trabajadores de esta institución supuestamente benéfica que, según la investigación, sacrificaba mascotas mediante personal no autorizado y sin respetar los plazos, enviaba ilegalmente animales a países del norte de Europa y desviaba fondos.
La investigación arrancó en noviembre tras varias denuncias de particulares. En Triple A se sacrificaban animales sin criterio clínico, sin anestesia y “con sufrimiento para el animal”. La Guardia Civil ha constatado que muchos cachorros sanos eran sacrificados para ahorrar gastos.
Los sacrificios los realizaba personal no facultado para prácticas veterinarias, quienes también administraban vacunas, realizaban cirugías y prescribían tratamientos.
Cuando se extraviaba algún animal en buen estado y llegaba a la protectora, los responsables preparaban su envío fuera de España, sin respetar los plazos establecidos por la normativa vigente ni dar la oportunidad a los legítimos propietarios a que pudieran recuperar a sus mascotas. Por cada animal expatriado, Triple A cobraba entre 300 y 350 euros. “Incluso mentían diciendo que los animales no estaban en sus instalaciones, extraían los chips auténticos y los sustituían por otros para poder exportarlos”, asegura la Guardia Civil.
Aunque el lema de Triple A era “Sacrificio 0”, los detenidos están acusados de maltrato animal, intrusismo profesional, estafa, apropiación indebida y pertenencia a grupo criminal, entre otros delitos. La organización llevaba 25 años dedicada a la recogida de animales en Marbella y San Pedro de Alcántara.
La protectora sobrevivía gracias al dinero recaudado en donaciones, cuotas de socios y eventos organizados para recaudar fondos, en los que solía estar presente buena parte de la alta sociedad marbellí. Las investigaciones policiales han descubierto que al menos una parte importante de esos fondos se desviaban a fines distintos a los estipulados en sus estatutos, como cenas, comidas, ropa o sueldos.