Bruselas estudia una prórroga de entre uno y dos años para España
Bruselas recordó ayer que hasta mediados de mayo no tomará una postura definitiva sobre el incumplimiento del déficit por parte de España y habrá que esperar hasta entonces para saber si le concede más tiempo para lograr los objetivos pactados. Sin embargo, el vicepresidente de la Comisión Europea para el euro, Valdis Dombrovskis, reconoció que el desvío de ocho décimas en las cuentas del 2015 “tendrá implicaciones para este año”.
En el entorno comunitario se habla de un año de prórroga (es lo que habría solicitado De Guindos) pero se es consciente de que con este plazo quizás no sea suficiente y se habla incluso de dos.
Antes de hacer su evaluación, el Ejecutivo comunitario quiere esperar a que Eurostat confirme mañana la cifra del 5% de déficit en el 2015 que ya avanzó el Gobierno (el pactado con Bruselas para el año anterior era del 4,2%). Con los nuevos datos, publicará las nuevas previsiones macroeconómicas de primavera el 3 de mayo y antes de que termine el mes anunciará cuáles son las condiciones para España. Antes de presentar en el Congreso la actualización del cuadro macro, el ministro de Economía, Luis de Guindos, tuvo ocasión de discutirlo la semana pasada en Washington con Dombrovskis y el comisario de Economía, Pierre Moscovici, en los márgenes de la asamblea del FMI.
Bruselas es consciente de que el Gobierno actual tiene poco margen para corregir la desviación del déficit, dado que está en funciones y, tras el 20 de diciembre, ya ha dicho en varias ocasiones que las reforse
definitivas las tendrá que anunciar el futuro ejecutivo. Teniendo en cuenta el incumplimiento en el 2015 y el que ya prevé Guindos en el 2016, España tendrá que tomar medidas muy drásticas para cuadrar las cuentas. Una tarea prácticamente imposible de llevar a cabo en tres meses si, como parece, habrá elecciones anticipadas y el nuevo gobierno no podrá tomar posesión hasta septiembre.
Hasta ahora, la Comisión siempre ha concedido prórroga a los países que no han seguido la senda de reducción pactada. La última, a Francia, hasta el 2017. Fuentes comunitarias apuntan que, en ese caso, las previsiones de crecimiento galas eran peores de lo previsto, una condición que Guindos también predice para la economía española. Bruselas, sin embargo, podría iniciar el procedimiento de infracción contra España, por haber cumplido el objetivo pactado y estar en procedimiento de déficit excesivo. Una decisión que en último término deberían validar los ministros de Economía en el Ecofin y que, hasta ahora, nunca se ha aplicado. Según otras fuentes, el aumento del plazo y la amenaza de las sanciones son compatibles.
EN MAYO, LA DECISIÓN La CE evaluará los datos definitivos del déficit y calculará el crecimiento español PREMIO Y CASTIGO No sería descartable un aplazamiento y, al mismo tiempo, abrir un expediente