¿Y la inversión pública?
La inversión pública desarrolla un papel primordial en la competitividad y la calidad económica, social y ambiental de un territorio porque facilita, conjuntamente con la inversión privada, poder ofrecer a sus habitantes las mejores condiciones de oportunidad, calidad de vida y servicios. El año 2015 la inversión pública fue el 2,7% del PIB de la zona euro (3,6% en el 2009), del 2,1% en España (5,1% en el 2009). En el periodo 20092015 la disminución de la inversión en España equivale al 45% de la reducción del déficit y al 22%, en la zona euro.
¿Y en Catalunya? A falta de datos oficiales publicados, se estima que la inversión pública fue, aproximadamente, el año 2015, del 1,9% del PIB (1,6% según los presupuestos de inversión en infraestructuras de los tres niveles de gobierno, más el 0,3% de la investigación y desarrollo).
Estos datos deben minorarse, probablemente, a causa de la baja ejecución presupuestaria en Catalunya del Ministerio de Fomento (direcciones generales, organismos autónomos y empresas públicas como Puertos del Estado, Adif, Enaire...), que en los últimos 15 años sólo ha ejecutado, por término medio, el 78% de lo previsto en los Presupuestos Generales del Estado, siendo en el 2013, último dato publicado, de sólo el 65% (el capítulo 3 de los anuarios estadísticos del Ministerio de Fomento, dedicado a la liquidación por territorios de la inversión real, ha dejado de ser accesible a su web).
La caída de la inversión pública en la zona euro en los últimos años ha impulsado a varias instancias nacionales e internacionales a pedir que se estimule el gasto en inversión pública como forma de incrementar la demanda a corto plazo. Respondiendo a esta demanda, la Unión Europea adoptó el Plan de Inversión para Europa
La baja inversión pública en Catalunya pone en riesgo el futuro de la competitividad de la economía
(2015), conocido como plan Juncker.
Un reciente estudio del BCE demuestra que el aumento de la inversión pública en infraestructuras, bajo circunstancias determinadas a fin de que la inversión sea efectiva, favorece el crecimiento y la mejora de las finanzas públicas, y sugiere que hace falta un cambio en las políticas de consolidación fiscal hasta ahora adoptadas.
En junio del 2015, Foment del Treball Nacional publicó el documento Por un nuevo modelo de gestión de infraestructuras, cuya actualización se hará pública en breve, en el cual se analizaban qué cambios deben introducirse, en línea con las recomendaciones de los organismos internacionales, en las políticas de infraestructuras para que la inversión sea efectiva.
Este bajo volumen inversor, por debajo del español o de la zona euro, de mantenerse en el tiempo, pone en riesgo la competitividad de la economía catalana y la calidad de vida de sus ciudadanos. ¿Cuántas oportunidades, empleos, riqueza y bienestar se han perdido por la falta, por ejemplo, del corredor mediterráneo de mercancías, de unos cercanías eficientes o de equipamientos sociales necesarios?