La reconversión bancaria pasa por la digitalización
Los bancos se centran en el cliente para ser más rentables
La reconversión de la banca, con los actuales bajos tipos de interés y la creciente regulación, pasa por digitalizar el negocio. La banca busca incrementar la rentabilidad y una de las palancas para llegar a tal fin es fidelizar a sus clientes a través del móvil y las tabletas.
Todos los banqueros coincidieron ayer, en el XXIII encuentro del Sector Financiero, en que los clientes más vinculados contratan más productos financieros. José Antonio Álvarez, consejero delegado del Santander, señaló que “la mejora de ingresos pasa por mayor vinculación de los clientes”. Admitió que los tipos negativos están afectando al mercado español y portugués. Y recordó que la actual rentabilidad de la banca se encuentra en el 11%. “El objetivo es que llegue al 13% en el 2018, cuando en los años precrisis se situaba por encima del 20%”, matizó.
En la misma línea se manifestó José Sevilla, consejero delegado de Bankia, que hizo hincapié en que “el actual escenario en el que opera la banca marcado por los bajos tipos de interés obliga a las entidades a replantearse su modelo de distribución, que debe estar centrado en el cliente”. Uno de los objetivos que se ha fijado Bankia es reducir en 2.000 millones los activos dudosos, con lo que lograría recortarlos en un 45% en tres años, lo que supondría unos 9.000 millones.
El Banco Popular también trata de subirse al carro de la banca digital. Su consejero delegado, Francisco Gómez, anunció que “se va a dar un fuerte impulso a la banca multicanal, donde ya cuenta con 860.000 clientes únicos digitales”.
La rentabilidad de la banca se sitúa en el 11%, cuando en los años precrisis llegó a alcanzar el 20%”
Cristina Parias, directora de España y Portugal de BBVA, además de la digitalización, resaltó como retos para el sector “la rentabilidad, la reducción de costes y la recuperación de la reputación del sector”.
Por su parte, Antonio Carrascosa, ex director general del FROB español y actualmente en el organismo de resolución europeo, destacó que se avanza en la creación de un mecanismo a nivel de Europa para “reducir la complejidad normativa” en caso de futuras quiebras bancarias, así como “en el establecimiento de sistemas para la valoración de los activos y la cooperación entre las distintas autoridades”. Incluso dejó entrever que se había analizado alguna entidad española. No ofreció nombres.
Por último, el gobernador Luis María Linde no ofreció recetas al sector bancario, pero mandó mensajes al futuro gobierno central al comentar que “la política fiscal deberá volver a adoptar un carácter restrictivo y que los ajustes económicos no han concluido”.